Sebastian Vettel, primer piloto del equipo Ferrari, acepta que llegan a Sakhir, circuito donde se llevará a cabo el Gran Premio de Bahréin, con muchas preguntas sobre el auto y la necesidad de dar respuestas para no atrasarse respecto a Mercedes y Red Bull en la temporada de la Fórmula 1.
“Las últimas dos semanas han sido muy intensas. Creo que tenemos algunas respuestas, pero como siempre nunca obtienes todas porque nunca se tiene la oportunidad de volver el tiempo y repetir todo”.
“Las cosas siguen, ahora estamos en Bahréin en un circuito diferente, pero creo que hemos aprendido algunas cosas sobre el auto y nosotros que debería ayudar para ser más competitivos. Creo que no estamos en posición de hacer promesas. La verdad es que necesitamos esperar y ver”, dijo el alemán, quien finalizó cuarto en Melbourne, Australia, a más de 50 segundos de Valtteri Bottas y su Mercedes, ganadores de la primera fecha del 2019.
“Creo que internamente el equipo está tranquilo. No ha sido fácil este par de semanas para tratar de entender y ponernos al corriente. Claramente nos hemos perdido algo, luego de tener un buen auto en la pretemporada. No estamos muy seguros de a dónde se fue en la primera competencia, esperemos que lo tengamos de vuelta y tengamos respuestas para los problemas”.
Ferrari ganó las últimas dos ediciones del GP bareiní y ha logrado podio en las carreras 2016 y 2015. El rápido circuito del desierto le sienta bien a la máquina de Maranello.
“Si hemos aprendido la lección se demostrará aquí. Al final, al mirar atrás, fuimos lentos casi en todas partes, a excepción de las curvas rápidas. Claramente hubo algo mal con el auto”.
Mattia Binotto, director deportivo de la ‘scuderia’ recientemente señaló que este no es el potencial del auto y confía en que la campaña mejorará.