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Grandes innovaciones tecnológicas de la F1

Este fin de semana la Fórmula 1 celebra su Gran Premio 1000 en su historia. Han sido 999 carreras a lo largo de 69 años (estamos en el 70) en los que muchas cosas han cambiado, y nos referimos a las cosas tecnológicas.

No solo han cambiado, lo cual es una obviedad, muchas de estas innovaciones llegaron a las calles, lo cual ha hecho nuestros autos más seguros, más confiables, más veloces, y bajo el paradigma actual, más verdes.

Repasemos las 10 mejores innovaciones a lo largo del a prolífica y muy creativa historia de la Fórmula 1.

Motor central: En 1957 el equipo Cooper puso el motor del T43 detrás del piloto y entre los dos ejes. No fue una idea nueva, pues Auto Union lo experimentó en los 30’s pero sí fue la primera vez que se hizo en la era F1. En 1958 Vanwall ganó el primer campeonato mundial de constructores y es el único que tiene un auto de motor delantero. A partir de 1959 inició el reinado del motor central.

Monocasco: En 1962 Colin Chapman presentó el Lotus 25. Inmediatamente revolucionó el diseño de los autos de carreras. El chasis monocasco irrumpió para convertirse en el común denominador de los autos de carreras y con los años, de los automóviles que usamos en la calle –por la estabilidad de manejo y la rigidez que provee mejor seguridad. Al año siguiente Jim Clark voló al campeonato con el Lotus 25 R4.

Aerodinámica (alerones): La aerodinámica aplicada a los autos de carreras es más vieja que la F1, pero fue en 1968 cuando Colin Chapman creó el Lotus 49 e introdujo los alerones a su modelo. Desde entonces han evolucionado hasta llegar a nuestros días… y a nuestros autos de calle.

Neumáticos lisos: Montjuic 1971. Firestone presenta unos neumáticos totalmente lisos, desafortunadamente en las prácticas hubo lluvia y solo se pudieron usar hasta la carrera. Ganó el Tyrell de Stewart con llantas Goodyear aún con dibujo –de los 10 primeros, solo 3 traían ‘slicks’ incluyendo el Matra de Amon que acabó tercero. Pero con el avance tecnológico las llantas lisas se han hecho la norma en el automovilismo.

Turbo: En 1977 Renault debutó el RS01 con un motor de 1.5l V6 Turbo. Pero el éxito no llegó hasta 1979 con el RS10 en el Gran Premio de Francia, ganado por el francés Jean-Pierre Jabouille. Así inició la primera era turbo de la categoría en los ‘locos 80’s’. Por supuesto, el turbo llegó a los autos de calle… y volvió a la máxima categoría.

Transmisión semiautomática y cambios en el volante: John Barnard logró en 1989 eliminar la estorbosa caja manual y la palanca de los autos de carrera, con el Ferrari 640, el primero con una caja semiautomática, clutch hidráulico y los cambios en el volante. El diseño comenzó en 1987 pero debido a problemas de confiabilidad, debutó hasta el ‘89. A mediados de los 90’s, todos los equipos tenían (y tienen) cajas semiautomáticas. Esto también impulsó su desarrollo en autos de calle.

Suspensión activa: En 1993, Adrian Newey y Williams lograron el FW15C, el auto más avanzado en la historia de la F1: caja semiautomática, frenos antibloqueo, control de tracción y la suspensión activa, que siempre mantenía la altura ideal. Con este auto Alain Prost ganó su cuarto campeonato mundial. Luego el francés se retiró y en 1994 se hizo efectivo el Protocolo Weikershof, con el cual la FIA prohibió la suspensión activa y el control de tracción. Estos avances se fueron acomodando en los autos de calle poco a poco, sobre todo el control de tracción.

Doble difusor: Honda vendió todo su equipo a Ross Brawn por 1 libra en diciembre de 2008 y el inglés debutó como dueño de un equipo. Brawn GP contaba con Jenson Button y Rubens Barrichello y un auto casi limpio de publicidad, pues nadie creía en lo que sucedería después: fueron campeones del mundo. ¿Cómo lo lograron? Montaron un doble difusor al final del fondo plano para generar más carga aerodinámica. El coche prácticamente iba sobre rieles. Button ganó su único campeonato y FIA prohibió el doble difusor.

Unidad de potencia: Para competir en la F1 actual se necesita de un fabricante de motores detrás (al menos como socio). La F1 se convierte en un laboratorio, un campo de pruebas extremo para nueva tecnología aplicable a los autos de calle. La industria automotriz, el mercado, demanda autos verdes y sustentables. La F1 creó las Unidades de Potencia conformada por seis elementos: motor de combustión interna, MGU-H y MGU-K, que son ítems para reutilizar la energía calórica y cinética que serán enviadas a una batería y generarán más potencia. También tenemos el turbo y el ECU (la computadora). Es así como un motor de apenas 1.6 litros V6 puede generar hasta 1000 caballos de fuera, con apenas 110 litros de combustible para más de 300 kms (que es la distancia promedio de un GP) y sin muchas partes para reutilizar a lo largo de 21 competencias. Es el pináculo de la eficiencia. En los próximos 10 años veremos cómo se van incorporando a la calle, empezando por la alta gama, como con La Ferrari, y poco a poco bajando.

Halo: Sí, es feo. Sí, es estorboso, tanto para entrar como para salir. Pero era necesario. Un escudo para la cabeza del piloto que puede resistir fuerzas brutales tal y como ya fue demostrado (ver el accidente de Fernando Alonso y Charles Leclerc). En los próximos años notaremos una evolución de esta pieza hasta, quizá, cerrar el auto de F1, que será otro hito en la larga historia de innovación que tiene la máxima categoría del automovilismo.