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En 11 meses, Checo Pérez pasó de piloto en desgracia a pieza clave en Red Bull

Antes del 6 de diciembre de 2020, la carrera de Sergio Pérez jugaba a la cuerda floja. No tenía contrato y por lo tanto tampoco futuro en la Fórmula 1. Era un piloto que no conocía el triunfo a pesar de 9 podios.

Su carrera era un ejemplo de consistencia en equipos de media tabla, también una trayectoria de mérito por superar a sus coequiperos o por lo menos darles pelea, pero algunas voces en la prensa especializada lo tachaban erróneamente como un "piloto de pago".

Falacias iban y venían en juicios a la ligera, pero las circunstancias en las que lo dejó la decisión de Lawrence Stroll de cortarlo de Racing Point, porque prefería a Sebastian Vettel para manejar su nueva compra, el equipo Aston Martin.

Pero del infortunio nació la oportunidad más grande, sólo por haberse quedado sin contrato en el momento en que Red Bull comenzaba a dudar de la capacidad de su segundo piloto, Alex Albon, lo llevo al asiente más cotizado de toda la Fórmula 1, el que está a lado de Max Verstappen.

Pero el 6 de diciembre de 2020, exactamente hace 11 meses, Checo ganó el Gran Premio de Sakhir en Bahrein y eso fue detonó que Christian Horner y compañía no lo pensaran más, el mexicano no se podía quedar sin lugar y ellos debían firmarlo.

Lo anunciaron el 18 de diciembre y ya como miembro de Milton Keynes ha enfrentado una temporada con picos y depresiones, pero momentos que ya lo ponen en la discusión de si debe ser considerado el mejor piloto mexicano de todos los tiempos.

Dieciocho carreras en el RB16B, un triunfo más, cinco podios y 165 puntos que coronados con el tercer lugar en el Gran Premio de México ya van formando una histórica temporada.

Once meses en los que pasó de la casi indigencia deportiva a un Foro Sol pletórico, un cuarto lugar en el campeonato de pilotos y estar a un punto del liderato en el de Constructores.

Ha ligado tres podios y toca la puerta de una segunda victoria en el año, otro hito jamás visto.

Su siguiente paso es robarles el tercer lugar de pilotos a Valtteri Bottas y con ello asegurar lo que sería otra hombrada nunca antes vista por un piloto nacido en tierras mexicanas.

¿Será el mejor piloto mexicano de todos los tiempos? No lo sé, pero su trayectoria de 11 años en la F1 (y los que faltan) es algo nunca antes visto.

Los Rodríguez fueron especiales, superdotados; Adrián Fernández mantuvo vivo el automovilismo y ayudó a sentar las bases de todo lo que hay ahora (el padre de Checo trabajó con él y el mismo piloto lo tuvo como modelo a seguir en su infancia), pero lo de Checo ya empieza a tomar tintes históricos llenos de momentos mágicos.

Por cierto, ¿alguien sabe si quien nomina y elige a los ganadores del Premio Nacional sabe que existe un tal Checo Pérez?