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El malestar que involuntariamente (o quizás no) provocó McLaren en el mexicano Pato O'Ward, al firmar como reserva al piloto estadounidense Colton Herta tuvo un momento curioso cuando se encontraron en el paddock del equipo en el circuito de Miami, donde el domingo se correrá el Gran Premio de Fórmula 1.  Llamó mucho la atención de la prensa la presencia del piloto de Andretti, en Indycar, Herta, con su padre y ex piloto Bryan en el hospitality, un poco incómodos, mientras que O'Ward y su compañero en el Arrow McLaren SP, Felix Rosenqvist, recorrían el paddock. A Pato O'Ward no le cayó nada bien que hace unas semanas McLaren ofreciera un contrato de F1 a Herta, cuando él probó en Abu Dhabi en el test de jóvenes y esperaba ser valorado de otra manera. Eso y las condiciones del contrato hicieron que O'Ward dijera hace un mes en Long Beach que no se sentía feliz en el equipo y que pensaba, tal vez, cambiar de aires. Luego vino un acercamiento del CEO de McLaren, Zak Brown, con Pato O'Ward y las cosas volvieron a la armonía: se habló de una extensión de contrato hasta 2025 y después, hablar de F1. El momento creció para Pato O'Ward con su victoria del 1 de mayo en Alabama y, aunque muchos esperan que se anuncie el nuevo acuerdo en Miami, eso no sucederá, según confío a ESPN el propio piloto, ya que aún está en proceso de ajuste el contrato que le ofreció McLaren. "Puede ser antes de Indy 500", dijo Pato O'Ward, quien reconoció que el triunfo le cayó muy bien y siente que el equipo le puede dar oportunidad de más victorias en 2022, incluso, ¿por qué no? en Indianapolis 500. Lo curioso fue ver a O'Ward en un diálogo de camaradería con Herta, cuando se disputan el mismo lugar en el 'corazón' de un equipo de F1. Finalmente, es en la pista, confió O'Ward, donde se decidirán las cosas entre Herta y él, pero antes debe estar a gusto con el contrato de Indycar que le han ofrecido, más tarde debe venir un acuerdo para su trabajo de reserva en F1 y lo demás "vendrá solo”.
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