El paraguayo fue octavo en los relojes, pero avanzó un puesto después de una sanción a Richard Verschoor. Sebastián Montoya se complicó con las rojas y deberá remar.
Roja y roja y roja… Así fue la clasificación de la 11ª fecha de Fórmula 2 en Monza. Fue imposible tratar de sacar una vuelta lanzada en el final y en esa ensalada, algunos sacaron rédito y otros la pasaron mal. Joshua Dürksen quedó del lado de los que se fueron con una sonrisa, todo lo contrario a Sebastián Montoya.
El paraguayo logró marcar un tiempo antes de que comenzara la seguidilla de interrupciones y se metió entre los diez. Y aguantó. Primero fue Gabriele Mini quien se quedó con un inconveniente técnico y llegó la roja. Cuando se mostró la verde, nadie logró cerrar una vuelta porque Leonardo Fornaroli, el líder del torneo, se detuvo por un problema técnico. Roja. Después de que sacaron el Dallara del italiano de la pista (también el de Ciam Shields que también se quedó) llegó la verde. Pero no duró nada, porque vino el golpe de Richard Verschoor contra la pared. Roja y final.
El neerlandés, contendiente al título, fue penalizado con la quinta de su mejor vuelta, tal como marca el reglamento. El piloto que provoca una roja en clasificación por un accidente pierde su vuelta más veloz. El piloto del MP cayó a 14º. Eso le permitió a Dürksen avanzar una posición en la qualy para quedar séptimo. El asunceño largará cuarto en la carrera sprint de este sábado.
En cambio, Montoya no pudo cerrar un giro en medio de tanta parate y se quedó sin tiempo. Así, deberá remontar desde el fondo en las dos competencias. Luke Browning se quedó con la pole y Dino Beganovic picará en punta este sábado por la inversión de grilla (fue décimo).
Leonardo Fornaroli tuvo inconvenientes con su monoplaza y no pudo completar la sesión clasificartoria para el GP de Italia.