El Toyota número 8 pilotado por el suizo Sébastien Buemi, el japonés Kazuki Nakajima y el neozelandés Brendon Hartley se hizo con la primera victoria de la temporada tras conquistar las 6 horas de Spa que inauguran una nueva era en el Mundial de Resistencia (WEC) con la entrada de los Hypercar.
Una nueva regulación, basada en reducir costes y atraer fabricantes, que arranca con el dominio de la marca nipona, como con los recientes LMP1, pero que en las próximas temporadas contará con marcas de renombre que volverán para luchar por las victorias como Peugeot, Porsche y Audi.
Eso sí, la victoria del Toyota 8 no fue tan fácil como en campañas anteriores, incluso fueron sancionados con 30 segundos en una parada en boxes por irregularidades en la misma. Además, el número 7, en el que participa el argentino Pechito López, tiró sus opciones por la borda debido a un error de pilotaje del japonés Kamui Kobayashi mientras se quitaba a los doblados, saliéndose a la gravilla. Sin embargo, lograron la tercera plaza.
El otro coche en la categoría de Hypercars, el Alpine de Nicolas Lapierre, Mathieu Vaxiviere y Alexandre Negrao, aprovechó el error para hacerse con la segunda posición de la carrera. Aunque con susto a falta de 54 minutos para el final ya que se tocó en la famosa curva de Eau Rouge con un doblado y 16 minutos más tarde sufrió un pinchazo.
Por su parte, el colombiano Juan Pablo Montoya y su compatriota Tatiana Calderón quedaron séptimos y octavos, respectivamente, en la segunda categoría, LMP2. Y el argentino Franco Colapinto tuvo que abandonar por un problema mecánico en su coche.
En la categoría GTEPro, los españoles firmaron una buena actuación. La pareja formada por Miguel Molina junto al brasileño Daniel Serra acabó tercera, mientras que Antonio García y el británico Oliver Gavin ocuparon la cuarta posición con el Corvette.
La segunda cita del calendario será el próximo 13 de junio, cuando se lleven a cabo las 8 horas de Portimao (Portugal).