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LeBron James se incorporó a Los Angeles Lakers de manera oficial el 9 de julio, pero su conexión con la ciudad comenzó mucho antes de que firmara su contrato de cuatro años y $153.3 millones. Sea porque ha vivido en la ciudad, porque solía practicar en la región o por sus empresas californianas, desde hace años que Los Ángeles es una especie de "Mundo Bron Bron" de "El Rey", que convirtió a la capital del entretenimiento en un imperio personal.

LeBron James ha sido uno de los atletas más famosos del planeta durante sus 16 temporadas en la NBA. Los Lakers están entre los equipos más conocidos del mundo, con sus 16 campeonatos. "Somos una pareja ideal", James le comentó a ESPN antes del inicio de la temporada. "Es la ciudad de las estrellas, está repleta de estrellas y de ganadores, y yo soy un ganador".

La presencia de James ha vuelto a atraer a las primeras filas a figuras de alto nivel del mundo de entretenimiento como Denzel Washington, Will Ferrell, Kate Beckinsale y Jeffrey Katzenberg. ¿Qué si esas charlas al lado de la cancha con los artistas de moda resultan en apariciones breves en películas? ¿Puede ser que la entrada más cotizada de la NBA (aumento de precio de 20 por ciento como local en el mercado de reventa, y boletos que son 19 por ciento más caros que cualquier otro equipo visitante) sea aún más difícil para conseguir? ¿Y si James cumple con su promesa y conduce a los Lakers a otra corona? ¿Sería más valioso que un campeonato típico?

Cuando LeBron James, sus amigos y sus socios emprendieron la senda empresarial, con la fundación de LRMR en 2006, apuntaron al mundo de la mercadotecnia. Los problemas que enfrentaron en el primer negocio les dieron una lección clave que utilizaron para los proyectos subsiguientes, SpringHill y Uninterrupted. Las iniciativas para aumentar las oportunidades promocionales de James establecieron colaboraciones lucrativas y únicas, en las que el jugador no sólo promocionaba el producto sino también contaba con acciones de la compañía. La sociedad con Beats by Dre significó una ganancia de $30 millones de dólares para James cuando la empresa Apple compró a esa compañía de audífonos, y el jugador dejó de promocionar a McDonald's a favor de convertirse en el rostro de Blaze Pizza, restaurante en el que compró acciones y uno de los de mayor crecimiento en Estados Unidos.

Para competir en ese mundo, James y sus socios se ubicaron en el centro de los medios del país, Los Ángeles. Durante los últimos años, James ha realizado en esa ciudad la mayoría de sus negocios extradeportivos, y además estableció allí su residencia cuando no estaba jugando en la temporada de la NBA. La próxima fase incluye su proyecto más ambicioso hasta el momento, la cinta "Space Jam 2". Su puesto con los Lakers no solo impacta las empresas actuales de James de manera positiva, sino que Los Ángeles también le abre puertas a un nuevo mundo de conexiones necesarias para desarrollar proyectos aún más grandes.

En 2011, el grupo de mercadotecnia de James, LRMR, se asoció con Fenway Sports Management, que le otorgó al astro 2 por ciento de las acciones del club Liverpool de la Liga Premier. John Henry y Tom Werner, dueño y presidente de los Boston Red Sox, habían comprado al club poco antes y le ofrecieron las acciones a cambio de un pago en efectivo de $6.5 millones. Las acciones de James en Liverpool han aumentado de valor hasta llegar a $32 millones.

La experiencia como accionista minoritario de Liverpool además otorga a James los conocimientos necesarios para algún día ser accionista principal de una franquicia como, digamos, los Cleveland Cavaliers. El socio y amigo de James, Maverick Carter, le confirmó a Rachel Nichols de ESPN que si los Cavs están en venta cuando el jugador se retire, seguramente tendrá interés en comprarlos.

La cabaña de dos pisos en Warner Village que alberga a SpringHill Entertainment, la empresa de medios de LeBron James y Maverick Carter, está colocada adentro del lote de las famosas instalaciones de Warner Bros. Studios en Burbank. Los amigos cuentan con sus propios lugares para estacionar afuera de la cabaña, en donde se filmaban "Friends", "Batman" y "ER", y oficinas en el segundo piso.

La mudanza de James a Los Ángeles este pasado verano se llevó a cabo tanto por la cercanía a Hollywood como a la promesa de los Lakers. Su primera entrevista extensa y sesión fotográfica tras firmar fue con la publicación "Hollywood Reporter", y pronto siguieron comunicados a los buzones de los medios con información sobre los proyectos de entretenimiento que James tenía en mente. Pero el interés de James por Hollywood comenzó mucho antes de que decidiera llevar sus talentos a Los Ángeles - firmó contrato de $15 millones con Warner Bros. hace tres años -- e incrementará al sentirse más cómodo en su nuevo hogar de California.

Al iniciar su carrera como empresario, LeBron James se dio cuenta de algo importante: como los actores que buscan graduarse a la dirección, y luego la producción de proyectos, James no quiso depender siempre de recibir un salario por sus servicios. "La Decisión" del 2010, el criticado show de televisión en el que anunció su fichaje con el Miami Heat, fue un paso en ese proceso. Quería apoderarse de la producción y controlar cada faceta de su carrera. Entonces así nació Uninterrupted, donde James y otros atletas controlan el mensaje desde el principio.

La compañía que se especializa en contar narrativas de primera persona es apenas un ejemplo de la misión de James, la cual es aprovechar su valor al máximo. Sea pedirle al comisionado de la NBA Adam Silver que implemente cambios en el calendario, creando su propia compañía de medios, tomando las riendas de vicepresidente del sindicato de jugadores o recaudando fondos escolares por medio de su fundación, James ha aprendido de las lecciones que le dejó "La Decisión".

Con su contrato de por vida de mil millones de dólares, LeBron James sería una pieza importante en los planes de Nike, sin importar el uniforme que vista en la NBA. Pero poco después de firmar con los Lakers, la maquinaria promocional se puso a trabajar a toda marcha. La compañía instaló carteles cerca del Staples Center, y la imagen de James con uniforme de local de los Lakers destacó sobre 30 pisos. Una imagen icónica de una clavada que ocurrió durante su campaña de novato en 2003 cubrió todo un costado del edificio del hotel JW Marriott.

Mientras la paleta de colores de su calzado de marca LeBron 16 para la primera mitad de la temporada se determinó antes de la temporada, Nike sigue en el trabajo de diseños con temas específicos a Los Ángeles y la historia de la franquicia.

A pesar del renovado foco en Los Ángeles, Nike ha mantenido la conexión con el Ohio natal de James. Durante el primer fin de semana de la temporada, Nike encargó una instalación artística compuesta de siete tablas de surf presentando a James con los colores de los Lakers. Las tablas serán rifadas, y los ingresos irán a la escuela I Promise School de James en Akron. Es una de las numerosas maneras en que Nike apoyará los proyectos de James mientras produce su calzado deportivo.

En 2012, James rompió con Creative Artists Agency cuando su amigo Rich Paul, que trabajaba en CAA, lanzó su propia agencia, Klutch Sports. James se mudó a Los Ángeles junto con Klutch, aunque la agencia mantuvo una oficina en el centro de Cleveland, y la compañía ahora representa a talentos como Ben Simmons, John Wall y Anthony Davis.

Los clientes de Paul militan con 14 equipos de la NBA, y no se trata de que cualquier jugador que firme con Klutch será inmediatamente considerado un posible compañero de equipo de James. Pero la liga está intrigada por la posibilidad de que Davis y James se junten en Los Ángeles.

Mucho antes de que LeBron James escogiera los colores de los Lakers, el astro jugaba bastante en las canchas de la ciudad. Si no está de viaje en China o Europa, o pasándosela con su familia en alguna isla exótica del Caribe, James seguramente está involucrado en juegos callejeros durante el verano en ambas costas, en Nueva York o Los Ángeles. En 2011, James causó sensación en Los Ángeles al sorprender a la Drew League con su presencia. Hasta se ha reunido con su buen amigo Chris Paul, y observado juegos callejeros con el artista Jay-Z, en las instalaciones de los Clippers en Playa Vista.

Al igual que otros basquetbolistas profesionales que residen en Los Ángeles durante el receso de temporada, James seguirá encontrando juegos competitivos y estelares en las canchas de UCLA. Visitó con otro amigo, Dwyane Wade, en 2017 y terminó levantando pesas con el equipo femenil de la universidad. Este pasado verano, luego que James firmara con los Lakers, una foto mostrando a James, Kevin Durant y Kawhi Leonard entrenando se hizo viral y generó expectativas entre los seguidores del equipo de que el trio se reuniera como compañeros en el Staples Center en 2019.

Un vistazo a la página Instagram de LeBron James ofrece una ecléctica mezcla de fotos y videos de sus juegos con los Lakers, mensajes que muestran su gran variedad de calzado Nike, ojeadas a su vida diaria en su hogar con su esposa y tres hijos, y tal vez algún comodín -- al reconocer la marca de vino que toma, mandar saludos a un jugador rival que respeta, o comentar sobre algún tema social que aqueja al país.

El sitio Socialblade.com indica que James, el atleta estadounidense más popular en las redes sociales, recopila diariamente 20,000 seguidores nuevos en Instagram. Es poco probable que cambie su manera de ser para satisfacer a sus nuevos seguidores. Un mensaje considerado comercial (#ad) mostrando sus Nike, su más reciente cartelera de Beats by Dre o alguna promoción al próximo capítulo de su programa de HBO "The Shop" se consume de manera más orgánica al ser rodeado por otros elementos de su vida diaria, publicaciones que con mayor frecuencia tienen sus orígenes en Los Ángeles.

Al contrario de sus pasadas cuatro temporadas en Cleveland, donde firmó varios contratos de un año, LeBron James estará en Los Ángeles a largo plazo. Firmó contrato de cuatro años sin opción de anular antes de la temporada 2021-22, y con su variedad de intereses y empresas, considera la ciudad como más que su hogar en la cancha. Quizás jamás sea tan amado por los fanáticos de los Lakers como Magic Johnson o Kobe Bryant, pero está encaminado a alcanzar niveles dentro y fuera de la cancha que ningún otro basquetbolista ha logrado.