Históricamente, México se ha distinguido por ser un país que prioriza sus recursos en contratar jugadores extranjeros, principalmente de países sudamericanos como Brasil, Argentina, Chile o Colombia. Son pocos los equipos que invierten en sus fuerzas básicas y como resultado, los pocos jugadores mexicanos que llegan a debutar y a consolidarse en el futbol mexicano, son cada vez menos.
Afortunadamente, han existido varios equipos a lo largo de estos últimos 40 años, que se han encargado de invertir fuertemente en la cantera y que han nutrido al futbol mexicano de jóvenes que se han hecho de un nombre en la liga y que en muchas ocasiones han emigrado a otros países para triunfar en el extranjero.