CINCINNATI -- Incluso el baile de Chad Johnson tras su touchdown dolió.

Los Cincinnati Bengals perdieron a tres titulares debido a lesiones, y otros cuantos terminaron adoloridos y sangrando tras vencer a los Cleveland Browns por 34-17 el domingo.

"Probablemente este haya sido el partido en el que más golpeados terminamos", dijo el mariscal Carson Palmer, a quien se lo notaba un tanto adolorido tras el segundo mejor día por aire en toda su carrera.

Los Brown, por su parte, no lograron mover el balón con éxito y se autodestruyeron repetidamente, al igual que la semana pasada.

"Creíamos que estábamos en una posición para ser competitivos, pero eso no fue lo que demostramos en los primeros dos juegos", sentenció el apoyador Andra Davis. "No es una buena sensación".

Palmer pasó para 352 yardas y sus primeros dos touchdowns de la temporada. Chris Henry, quien se declaró culpable a un cargo de posesión de arma de fuego hace cinco días, lideró el camino con cinco recepciones para 113 yardas. Rudi Johnson corrió para 145 yardas y dos touchdowns.

Fue la sexta ocasión en su carrera que Palmer supera las 300 yardas por aire, y una vez más confirmó que no tiene secuelas de la lesión en su rodilla.

"Nosotros vamos hasta donde nos lleva Carson", declaró el receptor Kelley Washington, quien tuvo un touchdown de 22 yardas. "Es un gran líder y un gran mariscal".

Las lesiones forzaron a improvisar a una de las ofensivas más balanceadas en la NFL.

El receptor abierto T.J. Houshmandzadeh y el tackle izquierdo Levi Jones estuvieron inactivos con sendas lesiones. Durante la primera mitad, los Bengals perdieron al centro Ruch Braham debido a una lesión de rodilla, al profundo Dexter Jackson por una lesión en el tobillo y al apoyador David Pollack, quien fue enviado al hospital con una lesión en el cuello no especificada. Pollack fue retirado en camilla, pero tenía movimiento completo de sus extremidades.

"Por eso hay que tener un plantel profundo", comentó el entrenador de los Bengals, Marvin Lewis. "Así son los mejores equipos".

El receptor Chad Johnson, se lastimó el hombro en una mala caída tras anotar su touchdown. Pero eso no impidió que realice "El Baile del Pollito" para festejar, tal como lo había hecho el día anterior en Oktoberfest. Siguió jugando, pero bastante adolorido. Y como si fuera poco recibió un fuerte golpe en el último pase del partido, lo cual provocó que le aplicaran algunos puntos de sutura debajo del mentón, y que terminara un tanto mareado.

"Hablé con Chad", dijo Palmer. "Estaba un poco desorientado".

Por su parte, los Browns no terminaron tan golpeados, pero tuvieron una tarde para el olvido.

"No jugamos bien ni a la ofensiva ni a la defensiva", sentenció el entrenador de Cleveland, Romeo Crennel. "No fue bueno lo nuestro. Eso es todo lo que puedo decirles".

TODO TERMINÓ CUANDO...

El corredor Rudi Johnson anotó un touchdown de 9 yardas con 7:52 por jugarse en el último cuarto.

EL BALÓN DEL PARTIDO ES PARA...

Carson Palmer, mariscal de los Cincinnati Bengals: completó 24 de 40 pases para 352 yardas y 2 touchdowns.

APUNTES FINALES

  • Charlie Frye completó 20 de 33 pases para 244 yardas. Su pase de 75 yardas a Braylon Edwards fue el más largo de su carrera.

  • Los Browns han comenzado con récord de 0-2 por tercera vez desde que se volvieron a unir a la liga como equipo de expansión en 1999.

  • El pateador de los Bengals, Shayne Graham, falló un gol de campo de 44 yardas, y terminó así con su racha de 17 goles de campo acertados en forma consecutiva, un récord de franquicia.

    Información de AP fue utilizada en esta nota