MINNEAPOLIS -- Destrozados por Adrian Peterson la última vez que se habían visto las caras, Brian Urlacher y los Bears encontraron la forma de detener al novato estelar de los Vikings durante la mayor parte de los primeros tres cuartos.

 Adrian Peterson
AP
Peterson tuvo dos carreras anotadoras para Minnesota

Pero no cuando realmente importaba.

Una carrera de touchdown de 8 yardas de Peterson, su segunda anotación de la noche, tras eludir a Urlacher con un movimiento de hombros en la línea de golpeo, permitió a Minnesota superar a Chicago el lunes por 20-13, y alcanzar así la quinta victoria consecutiva.

"No pudimos terminar el trabajo", sentenció Urlacher, quien no tenía muchas ganas de hablar después del partido.

Con este triunfo, los Vikings (8-6) se mantienen en control del último puesto de comodín en la NFC, a pesar de cometer cuatro entregas de balón en el partido, y fallar un punto extra. Sólo el excelente trabajo de la defensiva de Minnesota --y la inoperancia de los Bears-- evitó que Chicago se escapara demasiado lejos en el marcador, mientras la ofensiva de los Vikes regalaba el ovoide una y otra vez.

Las 249 yardas aéreas del mariscal Tarvaris Jackson, la mayor cantidad en su carrera, fueron opacadas por sus tres intercepciones. Esos errores llevaron a una ventaja de 13-3 a favor de los Bears, antes de que Peterson anotara el primero de sus dos touchdowns temprano en el tercer cuarto.

"Esto demuestra a la gente y a nosotros mismos que podemos ganar de diferentes maneras", comentó Jackson, quien completó 18 de sus 29 lanzamientos.

Peterson terminó con 78 yardas en 20 acarreos, lo suficiente para mantener a Minnesota un juego por delante de New Orleans y Washington, en la lucha por la sexta siembra de postemporada. Chicago (5-9), campeón defensor de la NFC, quedó oficialmente eliminado de la contienda.

"Sabíamos que debíamos jugar un partido completo, y al final, esos mismos hombres que habían realizado grandes jugadas al principio tenían que volver a hacerlo en el cuarto período", declaró el entrenador en jefe de los Bears, Lovie Smith, cuyo equipo fue penalizado 11 veces para 95 yardas.

Peterson venía de lo que él mismo había definido como el peor partido de su joven carrera, cuando consiguió apenas 3 yardas en 14 acarreos contra los San Francisco 49ers, y ante los Bears tuvo problemas para encontrar espacios durante buena parte de la noche. Además, los entrenadores lo culparon por un balón suelto en un fallido intercambio con el mariscal.

Pero el novato apareció en los momentos cruciales. En el tercer cuarto se lanzó por el aire para anotar desde una yarda y acercar a Minnesota a 13-12, antes del intento fracasado de punto extra. Y en el último período, con Jackson temporalmente en las laterales por un calambre en el muslo, Peterson agregó otra jugada destacada a su brillante campaña de primer año.

Opinión de un cazatalentos

Los dos equipos se concentraron en frenar la carrera, acercando ocho defensivos a la caja para forzar a los mariscales a lanzar el balón. Con ambos mariscales en dificultades para leer coberturas y lanzando desde sus talones --muy a menudo a las manos de un rival--, los Vikings regresaron a lo que los puso en carrera por un lugar en los playoffs.

En la segunda mitad, Minnesota comenzó a correr el balón por el lado izquierdo con el RB Adrian Peterson (foto), quien sumó 56 de sus 78 yardas después del medio tiempo. Atacando detrás del bloqueo del OT Bryant McKinnie y del OG Steve Hutchinson, Peterson logró hacer funcionar el juego terrestre, lo cual ayudó a los Vikings a sobrevivir a una actuación de tres intercepciones de parte del QB Tarvaris Jackson.

--Doug Kretz, Scouts Inc.

En tercera y gol desde la 8, Peterson congeló a Urlacher con una sacudida de hombros, para escurrirse a través de la línea de golpeo y llegar sin ser molestado hasta la zona de anotación. Urlacher movía la cabeza incrédulo de lado a lado, mientras Peterson celebraba con sus compañeros en las diagonales.

Lo increíble es que, en el arranque de esa jugada, Peterson y el mariscal Brooks Bollinger, quien había ingresado en lugar de Jackson, casi arruinan otro intercambio de balón.

"Fue un error de comunicación", admitió Peterson. "Pero logré hacerme del ovoide y realizar una gran jugada".

Bollinger corrió él mismo el balón para concretar la conversión de 2 puntos que puso a Minnesota arriba 20-13, con 10:56 por jugar, tiempo de sobra para que Chicago intentara remontar.

Sin embargo, Kyle Orton no lo consiguió. En su primer juego como titular en dos años, el mariscal de los Bears evitó las entregas de balón hasta casi el final. Pero inmediatamente después de la pausa de los 2 minutos, su pase largo hacia la zona de anotación fue interceptado por Darren Sharper.

Muchos de sus lanzamientos estuvieron lejos del blanco a lo largo del partido, y Orton terminó con 22 de 36 para 184 yardas.

"Me sentí cómodo en el juego, pero no logré suficientes jugadas como para ganar. Cúlpenme a mí por ello", declaró Orton.

Una de las jugadas que no logró concretar llegó en cuarta y 1, desde la yarda 35 de Minnesota, cerca del final del tercer cuarto. El pase corto de Orton al fullback Jason McKie fue demasiado alto y, en la subsiguiente posesión de Minnesota, Peterson arrancó sus motores y lideró la marcha que desembocó en el touchdown de la ventaja.

Los Vikings han recorrido un largo camino desde aquel 11 de noviembre en que fueron vapuleados por los Green Bay Packers 34-0.

¿Cuál es la diferencia de este equipo?

"No es una cuestión de cuerpos", respondió el entrenador en jefe Brad Childress. "Creo que más que nada es una cuestión de mentalidad".

APUNTES FINALES

  • En la segunda mitad, Minnesota no contó con el estelar esquinero Antoine Winfield, debido a una lesión de hombro.

  • Chicago convirtió sólo una vez de 14 en terceras oportunidades.

  • Urlacher tuvo una de esas actuaciones que lo llevaron a ser elegido seis veces al Pro Bowl: presionó constantemente a Jackson, registró dos capturas de mariscal y logró dos robos de balón.

    Información de AP fue utilizada en esta nota.