PITTSBURGH -- Ben Roethlisberger lanzó para 328 yardas y cinco touchdowns, como parte de un ataque que no extraña en absoluto a Le'Veon Bell, y los Pittsburgh Steelers trituraron el jueves 52-21 a los Carolina Panthers para hilvanar su quinto triunfo seguido.

James Conner corrió para 65 yardas y una anotación, pero se marchó en las postrimerías del encuentro, por una posible conmoción cerebral. Antonio Brown añadió ocho recepciones para 96 yardas. En el segundo periodo, capturó un envío y lo condujo 53 yardas hasta la zona prometida, con lo que cerró un día agitado en que el receptor fue citado por conducir de manera imprudente. La policía señaló que Brown conducía su Porsche a 100 millas (160 kilómetros) por hora sobre una transitada autopista de los suburbios al norte de Pittsburgh. En la jornada, Bell, tres veces elegido al Pro Bowl como corredor pero quien no ha firmado su convenio como "jugador franquicia", tuiteó sus opiniones mientras miraba el partido por televisión. Los Steelers (6-2-1) tuvieron un día de campo en su ausencia. Bell tiene hasta el próximo martes para firmar un contrato si quiere jugar esta temporada. Varios de sus compañeros han expresado que están hartos de hablar de la situación de Bell. Y por ahora, los Steelers han dejado claro que están en una estupenda situación. Carolina no tanto. Los Panthers (6-3) vieron cortada una racha de tres victorias consecutivas en una ciudad en la que jamás han ganado. Cayeron a una foja de 0-4 en Pittsburgh. El jueves, no tuvieron una sola oportunidad de ganar. Los Steelers anotaron 21 puntos en los primeros 11 minutos.