El gobernador solicitó reunirse con la legislatura en sesión especial para incentivar que los equipos permanezcan en Kansas City
El gobernador de Missouri anunció que convocará a la Legislatura a una sesión especial para considerar incentivos destinados a impedir que los Kansas City Chiefs y Royals se muden a Kansas, después de que los legisladores no aprobaron un plan durante su sesión anual regular.
El gobernador republicano Mike Kehoe quiere que su estado ayude con la renovación o la construcción de un estadio nuevo para los Chiefs y con una nueva sede para los Royals. Una ley de Kansas promulgada el año pasado autoriza bonos estatales por el 70 por ciento del costo de un nuevo estadio, pagándolos en 30 años con ingresos de las apuestas deportivas, venta de billetes de la lotería estatal y nuevos impuestos sobre las ventas y el alcohol.
Los votantes del condado de Jackson, Missouri, donde se encuentran los equipos, animaron a oficiales de Kansas a hacer un intento por atraer a las franquicias al rechazar una extensión del impuesto sobre las ventas el año pasado que habría ayudado a financiar un nuevo parque de 2,000 millones de dólares para los Royals y una renovación de 800 millones para el Arrowhead Stadium de los Chiefs.
Los Chiefs y los Royals han jugado durante más de 50 años en estadios contiguos en el este de Kansas City, atrayendo a aficionados de ambos estados del área metropolitana. Los contratos de arrendamiento de sus estadios se extienden hasta el 2031.
"Este es un enorme paquete de desarrollo económico", declaró Kehoe a la prensa durante una conferencia de prensa transmitida en vivo desde el Capitolio de Missouri en Jefferson City. "Me gustaría que nos aseguráramos de que podemos consolidar nuestra oferta con la aprobación legislativa".
La Cámara de Representantes de Missouri aprobó el martes un proyecto de ley respaldado por Kehoe que permitiría al estado emitir bonos por hasta la mitad del costo de los proyectos de los estadios y otorgar créditos fiscales de hasta 50 millones de dólares.
Sin embargo, el Senado suspendió abruptamente su sesión ordinaria el miércoles tras una polémica disputa sobre una medida antiabortista, sin abordar la medida de financiamiento del estadio.
Al menos algunos legisladores de Kansas y Missouri se muestran escépticos ante los incentivos estatales. Muchos economistas sostienen que la financiación pública de los estadios no vale la pena, porque los deportes tienden a desviar el gasto discrecional de otras formas de entretenimiento en lugar de generar nuevos ingresos.