Justin Fields, QB de Jets, regresó a la práctica este viernes, pero no participó en ningún ejercicio un día después de sufrir una lesión en el dedo del pie.

FLORHAM PARK, N.J. -- Un día después de un susto por la lesión que incendió las redes sociales con los peores escenarios, el mariscal de campo de los New York Jets, Justin Fields, regresó al campo, con su uniforme completo de entrenamiento, ansioso por participar.

Fields, quien fue retirado en carrito el jueves por la mañana con un dedo dislocado del pie derecho, estuvo presente este viernes. Registrado como día a día, se mantuvo fuera por precaución. No mostró signos de cojera durante los estiramientos y calentamientos, pero esa fue toda su participación. No lanzó ni corrió.

Sin embargo, quería participar.

"Así es Justin", aseguró el entrenador Aaron Glenn después del entrenamiento. "Prefiero tener a alguien al que tener que contener que tener que decirle que se vaya. Tiene ese físico".

Los Jets, conocidos por sus desastres con mariscal de campo, evitaron el desastre esta vez.

Glenn sugirió que el temor por la lesión se había exagerado, diciendo: "La enorme tormenta que se armó realmente no tenía sentido". Pero reconoció que hubo preocupación inicial. Ningún entrenador quiere ver a su mariscal de campo titular salir cojeando del campo con la ayuda de un preparador físico, pero sus temores se disiparon poco después cuando las pruebas revelaron una lesión leve.

Fields no se lesionó el dedo gordo del pie, lo cual fue una buena noticia. Los Jets no especificaron cuál. Fue pisado por un liniero ofensivo, según Glenn, quien insistió en que no sintió alivio al enterarse del diagnóstico.

"Bueno, la cosa es que yo no pienso así", afirmó. "Lo único en lo que pienso es que el próximo tiene que estar listo para la operación. Así es esta liga".

Fields corrió hacia el campo de entrenamiento, casco en mano, y firmó autógrafos para algunos jóvenes aficionados: la primera señal visible de que estaba bien. Permaneció en el campo durante los 90 minutos de entrenamiento, lo cual significó mucho para sus compañeros.

"Su presencia en el campo aporta energía al equipo", sostuvo el mariscal de campo suplente Tyrod Taylor, quien dirigió la ofensiva. "Es uno de nuestros líderes. Obviamente, que no haya estado lesionado durante tanto tiempo es una buena noticia. Verlo con energía, de vuelta en el campo, listo para competir... sí, fue bueno tenerlo ahí".

Si bien no es una lesión grave, tampoco debería pasarse por alto fácilmente. Después de todo, la mayor virtud de Fields es su movilidad. Desde que ingresó a la liga como la selección de primera ronda de los Chicago Bears en 2021, ha acumulado 1466 yardas, cuarto entre los mariscales de campo, según ESPN Research.