Los movimientos en la posición de mariscal de campo han dado resultados inesperados para los equipos protagonistas
El primer cuarto de la temporada podría enseñarnos que --en algunas ocasiones-- cambiar de aires en la posición más importante del futbol americano es un auténtico elixir de vitalidad.
La agencia libre 2025 prometía sacudir la NFL y luego de las primeras tres semanas de la temporada regular ya podemos ver sus frutos, así como algunos resultados inesperados.
El carrusel de mariscales de campo no solo significó un cambio de piezas, sino que puso bajo el microscopio a los encargados de tomar decisiones que apostaron fuerte por la posición.

Daniel Jones, Indianapolis Colts (3-0)
La resurrección más improbable del año. De ser descartado con los New York Giants a convertirse en el eje de una ofensiva que hoy es la segunda más productiva de la NFL. Daniel Jones ha lanzado para al menos de 225 yardas y un touchdown sin intercepciones en cada juego de este año, además de sumar anotaciones por tierra. Más que un fichaje, fue un robo de la agencia libre para los Colts.
Prueba de fuego: Esta semana Daniel Jones enfrenta a Los Angeles Rams que cuentan con una de las defensivas más agresivas, capaces de frenar incluso a los vigentes campeones de la NFL, Philadelphia Eagles.

Sam Darnold, Seattle Seahawks (2-1)
Seattle buscaba estabilidad y Sam Darnold --etiquetado por años como "promesa fallida"-- la está entregando. Sam Darnold hoy luce entre los quarterbacks más eficientes de la liga, acumulando cinco touchdowns y dos intercepciones en la temporada.

Aaron Rodgers, Pittsburgh Steelers (2-1)
El veterano no llegó a Pittsburgh para retirarse en silencio. Con 510 pases de touchdown (cuarta mayor cantidad en la historia de la NFL) y 63,538 yardas aéreas (N° 6 de la historia), Aaron Rodgers aporta jerarquía instantánea. Ante los Minnesota Vikings --su próximo rival-- acumula 7,401 yardas aéreas y 63 pases de touchdown en su carrera. Más allá de las cifras, devolvió credibilidad ofensiva a una franquicia que necesitaba un líder probado.
Advertencia: Estos Vikings han sido uno de los equipos más oportunistas en robos de balón, una trampa para cualquiera que se confíe.

Geno Smith, Las Vegas Raiders (1-2)
Sus estadísticas individuales son impresionantes, está en el segundo lugar de la liga en yardas aéreas (831) y un índice de pasador de 132.7 hasta la Semana 3. Sin embargo, los Raiders no con un equipo ganador. Geno Smith llegó con la presión de un costoso canje y la expectativa de una extensión de contrato; por ahora, el brillo personal no se traduce en victorias.
Próxima prueba: Un duelo contra los Chicago Bears y una defensiva que ya suma cuatro intercepciones.

Justin Fields, New York Jets (0-3, lesionado)
De reemplazo prometedor a incógnita total. Justin Fields mostró destellos con sus piernas (49 yardas terrestres en la Semana 2), pero la ofensiva nunca arrancó. La lesión que lo margina --una conmoción cerebral-- podría costarle la titularidad… y el futuro en los Jets.

Russell Wilson, New York Giants (0-3, degradado)
El claro perdedor del grupo, fue enviado a la banca luego de la derrota 22-9 ante los Kansas City Chiefs el domingo pasado. Russell Wilson no logró brillar el año pasado con los Steelers y esta semana los Giants le quitaron la titularidad para dejarle su lugar al novato Jaxson Dart.
Daniel Jones, Sam Darnold y Aaron Rodgers prueban que un nuevo código postal puede revivir carreras y franquicias enteras.
Geno Smith, Justin Fields y Russell Wilson, en cambio, encarnan lo cruel que puede ser la NFL cuando las expectativas pesan más que las victorias.
Si algo podemos aprender de este primer cuarto de temporada es que el cambio de aires, bien aprovechado, puede convertir a un quarterback descartado en un buen titular en el lugar adecuado.
