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Todd Gurley cambiará las fiestas del Super Bowl por jugar el partido

Todd Gurley es un gran aficionado a los deportes que ama ir al Super Bowl cada invierno, asistiendo a todas las fiestas y empapándose de la atmósfera el día del juego.

Este año, el corredor estelar de Los Angeles Rams se perderá todas esas fiestas en Atlanta, pero no le importa demasiado.

"Estoy acostumbrado a ir al Super Bowl, estar con mis muchachos, salir", declaró Gurley. "Pero ahora tengo la oportunidad de jugar en el de este año, así que es fantástico. Es una gran sensación. Todos estamos felices. Estoy feliz. No hay mejor sentimiento que cómo nos sentimos en este momento".

Los Rams (15-3) quieren que Gurley sea algo más que un espectador contra los New England Patriots, y probablemente necesitarán mucho más del Jugador Ofensivo del Año del 2017 que lo que pudo darles en el Juego por el Campeonato de la NFC.

Gurley no es una persona que fanfarronea en público, pero tiene confianza en su capacidad para terminar la temporada de gran forma. También insiste que no le importa si C.J. Anderson o alguien más hace su trabajo, siempre y cuando los Rams consigan sus anillos.

"Todos tenemos nuestros momentos malos, pero lo disfrutas aún más cuando haces algo fantástico o tienes éxito", expresó Gurley. "Sé quién soy. Estoy cómodo conmigo mismo. Soy el mejor. Soy el mejor en mi posición. He sido así toda mi vida, así que voy a seguir esforzándome. Sé lo que puedo hacer".

Nadie lo vio en New Orleans, donde Gurley casi no tuvo impacto en la victoria en tiempo extra de los Rams, 26-23, sobre los Saints. El corredor mejor pagado en la historia de la NFL tocó el balón en apenas cinco ocasiones, aunque anotó un touchdown en uno de esos toques de balón, corriendo apenas cuatro veces y no pudo atrapar dos de los tres pases lanzados en su dirección.

Fue prácticamente un espectador en la recta final mientras observaba a Anderson, el corredor veterano adquirido por Los Angeles para cubrir el lugar de Gurley, quien se perdió los últimos dos partidos de la temporada regular por u a lesión en la rodilla.

A diferencia de algunos corredores de élite, Gurley ha señalado en repetidas ocasiones que no le importa cuántos toques de balón tenga siempre y cuando los Rams ganen. Parece tener una buena relación con Anderson, quien pronostica una buena actuación de Gurley en el Super Bowl.

También recuerda la miserable temporada 4-12 de los Rams en el 2016, cuando su capacidad fue cuestionada. Ser parte de un equipo ganador es infinitamente más atractivo que ser una estrella en un equipo perdedor.

"Todo este juego es más importante que yo", sentenció Gurley. "No se trata sólo de mí. ¿Por qué Todd no recibe el balón? ¿Por qué es eso? Porque sólo hay un balón y hay 11 jugadores".

Sin embargo, Gurley es una de las principales razones por las que los Rams estuvieron en posición de llegar al Super Bowl en primer lugar, gracias a su excepcional temporada regular. Terminó en el tercer lugar de la liga con 1,251 yardas por tierra y acumuló 21 touchdowns, la mayor cifra de la NFL, brillando como corredor y receptor por segundo año consecutivo en la ofensiva del entrenador en jefe Sean McVay.

Pero los altibajos de Gurley desde principios de diciembre han sido sorpresivos y posiblemente problemáticos para los Rams.

Aunque fue efectivo como receptor, Gurley sumó apenas 76 yardas combinadas en sus últimos dos partidos de temporada regular en diciembre antes de perderse los últimos dos juegos de Los Angeles. Regresó con un partido de 115 yardas por tierra contra los Dallas Cowboys en la Ronda Divisional, pero Anderson terminó con 123 yardas, y después Gurley apenas fue tomado en cuenta en el plan de juego de los Rams en New Orleans.

McVay ha intentado asumir la culpa por sus pobres actuaciones.

"Cada vez que tienes un jugador como Todd Gurley en tu equipo, tienes que hacer un mejor trabajo para involucrarlo y meterlo al juego", refirió McVay esta semana, lamentando la falta de toques del corredor contra los Saints. "Eso es algo de lo que soy responsable".

Pero si McVay recurre pronto y constante a Anderson de nuevo en Atlanta, Gurley insiste que no le molestará ver otro Super Bowl.

"Vives para momentos así", sentenció Gurley. "Pero como dije, vives, aprendes. No me importa lo que haga [en el juego], sinceramente quiero ganar, así que no me importa en verdad. Siempre quiero hacerlo bien, pero sólo quiero ganar".

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