La NFL no ya sido informada de ninguna amenaza contra el Super Bowl LIII entre New England Patriots y Los Angeles Rams, informó el cuerpo de seguridad de la liga.
"No tenemos ninguna amenaza creíble o específica que haya llamado nuestra atención", declaró la jefa de seguridad de la NFL, Cathy Lanier, durante una conferencia en Atlanta, junto a autoridades de seguridad federales, estatales y locales.
La ciudad ha sido vigilada por helicópteros y oficiales de policía que patrullan la ciudad a caballo, en bicicleta y a pie. También, perros policía han inspeccionado a los visitantes en algunos hoteles y otra instalaciones.
Más de 600 empleados federales protegerán la ciudad. Oficiales del servicio secreto y miembros de la Guardia Costera también estarán presentes y se unirán a la policía local, estatal y otras agencias.
El departamento de energía de los Estados Unidos pidió a los residentes que no se alarmaran por los helicópteros que vuelan bajo equipados con tecnología sensible a la radiación.
El espacio aéreo en el área del Mercedes-Benz Stadium estará restringido y los drones no tendrán permitido volar.
También, los oficiales de policía de la ciudad trabajan turnos de 12 horas para estar visibles. La mayor preocupación de las autoridades locales en los últimos días ha sido el clima y el tráfico.