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Hay que darle crédito a Moore, más que a Prescott

ARLINGTON, Texas -- Dak Prescott lanzó cuatro pases de touchdown y superó las 400 yardas por aire. Pero quizá habrá que darle más crédito a otra persona del éxito que tuvo la ofensiva en el primer juego de temporada.

Bajo el mando al ataque del nuevo coordinador ofensivo, Kellen Moore, los Dallas Cowboys vencieron 35-17 a los New York Giants, que tuvieron suerte de que el marcador final sea menos escandaloso de lo que se vio en el campo de juego.

Los Cowboys terminaron cuatro series ofensivas consecutivas en las diagonales, a partir de la segunda. Y la primera vez que tuvieron el balón, fueron errores individuales los que evitaron que acabaran también con puntos.

Moore mostró un plan de juego agresivo, muy diferente al del anterior coordinador ofensivo, Scott Linehan, e incluso que el de Jason Garrett cuando era el que llamaba las jugadas.

"Desde que nos asentamos un poco, creo que jugamos buena ofensiva", dijo Garrett. "Hicimos buen trabajo mezclando carreras y pases. Hicimos muchas jugadas por pase. Un montón de muchachos estuvieron involucrados".

La ofensiva generó 494 yardas totales, incluidas 405 por pase.

El corredor Ezekiel Elliott, a pesar de que estuvo ausente durante la pretemporada, fue el corredor titular, aunque su actividad fue muy limitada, comparada con sus tres años anteirores.

Elliott tuvo 13 acarreos, la misma cantidad que el novato Toni Pollar; ganó 53 yardas y anotó el último touchdown de los Cowboys en una carrera de 10 yardas, de las que al menos cinco fueron por mérito propio, llamando al contacto y jalando las piernas, como acostumbra hacerlo.

"Me sentí muy bien allá afuera con mis muchachos", dijo Elliott en el vestidor. "Es grandioso estar aquí de nuevo. Pero en realidad a la ofensiva el juego fue de Dak. Tuvo un gran desempeño. La defensa detuvo en las situaciones clave y hoy mostramos que tenemos demasiadas armas en todas las posiciones".

Este domingo, fue la primera vez que un quarterback en la historia de los Cowboys tiene un índice de pasador perfecto, 158.3 puntos.

Prescott completó 25 de 32 pases lanzando cuatro touchdowns a receptores diferentes, además de que completó con otros cuatro jugadores más. Salió sin intercepciones y corrió para un par de primeros y 10.

El receptor Michael Gallup mostró que no fue casualidad el gran campamento de pretemporada que tuvo. Terminó con siete recepciones en igual número de ocasiones que lanzaron el balón para 158 yardas, incluida una de 62.

Amari Cooper jugó partido completo y cachó seis veces el balón para 106 yardas y toucdhown.

Este domingo, marcó el regreso de Jason Witten, quien se convirtió en el jugador que más temporadas completas ha comenzado con el casco de la estrella solitaria, 17.

"Cada uno de ellos tuvo gran juego", consideró Garrett. "Cada vez que Dak fue hacia ellos, ellos respondieron. Amari se vio saludable y como si hubiera hecho pretemporada".

Del lado defensivo, Dallas cumplió, aunque se notó la falta de trabajo de varios de sus titulares que no hicieron pretemporada por diversas causas, en especial convalecencia de operaciones, como DeMarcus Lawrence (hombro).

Lawrence, de cualquier manera, estuvo por todos lados presionando al quarterback de los Giants, Eli Manning. Tuvo media captura y provocó balón suelto.

Jeff Heath y los linebackers Leighton Vander Esch y Jaylon Smith fueron los mejores defensivos en tackleadas y presencia.

El corredor de los Giants Saquon Barkley corrió para 120 yardas y Manning pasó para 306 yardas, aunque algunas de esas fueron cuando el partido estaba decidido y los Cowboys tenían suplentes en la cancha durante la segunda mitad.

"Obviamente, hicimos cosas buenas para construir a partir de ahí", dijo el linebacker Sean Lee. "Pero es una temporada muy larga. Fue bueno ganar, pero a partir de mañana habrá que trabajar en mejorar porque el domingo siguiente tenemos otro rival divisional que enfrentar".

Los Cowboys visitan a los Washington Redskins en la Semana 2 de la temporada.