Una semana antes de su reunión programada con investigadores de la NFL, el receptor abierto agente libre Antonio Brown dijo en un mensaje en su cuenta de Twitter lleno de groserías que quiere que la liga "limpie mi nombre" pero reiteró que "nunca volveré a jugar" de nuevo en la liga que asegura trata injustamente a los jugadores de color.
Este jueves temprano, varias fuentes indicaron a Josina Anderson de ESPN que Brown tendría programado reunirse con la NFL la próxima semana en relación con las acusaciones de asalto sexual de múltiples mujeres y que el receptor abierto veterano estaría ansioso por dar su versión.
Sin embargo, horas más tarde, Brown recurrió a las redes sociales para mostrar su frustración con la liga.
"Imaginen ajustarse a un sistema dándole un 100 por ciento para ver que me traten así, ¡es injusto!", escribió Brown en su cuenta de Twitter. "Ganar dinero de mi sudor y sangre, que se pudra la NFL, nunca jugaré en esa basura que trata a la gente de color de lo peor. Limpien mi nombre y váyanse al diablo"
Sin embargo, este jueves por la tarde, Brown volvió a cambiar de tono, publicando otro mensaje en redes sociales indicando que estaba "muy frustrado" y "determinado" en volver a la NFL.
I'm just very frustrated right now with the false allegations and slander to my name. I love football and I miss it. I just want to play and I'm very emotional about that. I'm determined to make my way back to the NFL asap
— AB (@AB84) 7 de noviembre de 2019
"Estoy muy frustrado en este momento con las falsas acusaciones y calumnias a mi nombre", escribió. "Amo el fútbol americano y lo extraño. Sólo quiero jugar y estoy muy emocional por eso. Estoy determinado en volver a la NFL lo antes posible".
A pesar que Brown anunció inicialmente en Twitter el 22 de septiembre que "ya no jugaré más en la NFL", fuentes dijeron a Jeremy Fowler de ESPN el mes pasado que Brown espera que se aclare su estado antes de firmar con un equipo de la NFL.
Fuentes dijeron a ESPN este jueves que hay equipos interesados en firmarlo a la espera de la resolución de la larga investigación de la liga.
La NFL todavía no ha entrevistado a Brown. El receptor abierto veterano fue cortado por los New England Patriots en la Semana 3 luego de jugar sólo un partido.
Brown está siendo investigado por la NFL bajo las políticas de conducta personal luego de una demanda presentada por su ex entrenadora, quien allega que fue agredida sexualmente en múltiples ocasiones. Brown también fue acusado de conducta sexual inapropiada en su casa por una artista que estuvo trabajando allí en el 2017.
Brown recibió oficialmente los documentos de la demanda de Taylor, dijeron las fuentes a ESPN y contrató a la abogada Camille Blanton para manejar su caso. Todo sucedió el viernes y Brown ha solicitado 45 días para responder.
Brown sólo ha jugado un partido esta temporada, en la Semana 2 contra los Miami Dolphins. Fue liberado por los Oakland Raiders antes del comienzo de la temporada y por los Patriots antes de la Semana 3, luego que se dio a conocer que le envió mensajes de texto a la artista que lo acusó de mala conducta.
Brown ha presentado ocho quejas contra los Raiders y Patriots, señaló una fuente a Dan Graziano de ESPN. Brown está buscando 39.775 millones de dólares perdidos en salario, bonos y dinero garantizado.