CINCINNATI -- El receptor abierto de los Cincinnati Bengals, A.J. Green, decidió no tratar de jugar en los dos partidos finales dado que no se ha recuperado por completo de una cirugía en el tobillo practicada durante el campamento de entrenamiento.
El mejor jugador de los Bengals dijo este miércoles que espera sanar por completo en la temporada baja, cuando puede convertirse en agente libre. Dijo no estar seguro si se quedaría en Cincinnati tras nueve temporadas, y no participará en los trabajos de temporada baja si los Bengals emplean su etiqueta de jugador franquicia sobre él.
Green fue examinado esta semana por el médico que realizó la cirugía y se le informó que la lesión --sufrida en la primera práctica del campamento de entrenamiento-- sanaría por completo. Green dijo que todavía no posee fuerzo ni rango de movimiento completo, por lo que no intentaría jugar en uno de los dos partidos finales.
Los Bengals (1-13) son el único equipo de la NFL con una victoria. Ellos finalizan de visita ante los Miami Dolphins y en casa ante los Cleveland Browns.
"Llegué a la decisión de que es mejor para mí simplemente tomarme el año, que sane esta cosa para que a la larga en el siguiente par de años en mi carrera, no tenga problemas", expresó Green.
Los Bengals lo llevaron en la plantilla activa toda la temporada --esencialmente, jugando con uno menos--, con la esperanza de que pudiera regresar.
Green reiteró que le gustaría quedarse en Cincinnati, donde ha hecho equipo con Andy Dalton desde 2011 para reescribir muchos de los récords aéreos del club. A Dalton le resta un año de contrato y fue enviado a la banca por tres partidos en la campaña, al tiempo que los Bengals investigaban sus opciones a largo plazo en la posición de quarterback.
Con una derrota más, asegurarían el primer turno global del siguiente draft, dándoles la oportunidad de seleccionar al ganador del Trofeo Heisman, Joe Burrow, o a otro pasador.
Si los Bengals no logran acuerdo para un nuevo contrato con Green, podrían emplear su designación de jugador franquicia para retenerlo en el 2020 a cambio de unos 18 millones de dólares. Green dijo este miércoles que consideraría eso como una indicación de que el club no lo desearía a largo plazo, por lo que podría ausentarse del trabajo de temporada baja, incluso si los Bengals trabajan con un quarterback nuevo.
"Todo negocio necesita tomar decisiones", dijo Green. "Para mí, soy mi propio negocio, así que debo tomar decisiones de mi lado, también".