|
ALAMEDA -- El corredor de los Oakland Raiders, Josh Jacobs, alguna vez fue un niño en situación de calle, en ocasiones viviendo junto a sus cuatro hermanos con su padre, Marty, en un auto en la sección norte de Tulsa, Oklahoma. El martes, el recluta N° 24 globakl del draft del 2019 y uno de los candidatos principales para ser nombrado Novato Ofensivo del Año en la NFL, se acercó a redes sociales para anunciar que había comprado una casa para su padre. Los Raiders también circularon un video de la reacción de Marty, señalando que la casa se encontraba en Oklahoma. Jacobs corrió para 1,150 yardas y siete touchdowns con un promedio de 4.8 yardas por acarreo, y atrapó 20 pases para 166 yardas y ocho primeros intentos, a pesar de perderse tres de los cuatro partidos finales de los Raiders por una fractura en el hombro derecho. Sus 88.5 yardas terrestres por juego lo ranquearon tercero en la NFL, detrás de Derrick Henry de los Tennessee Titans (102.7) y Nick Chubb de los Cleveland Browns (93.4). Antes de perderse esos encuentros, Jacobs había jugado con dolor luego de haber sufrido la lesión originalmente en la Semana 7. Fue seleccionado con un turno adquirido en el canje por Khalil Mack, en el 2018. El viaje de Jacobs desde vivir en situación de calle hasta convertirse en un estelar de la preparatoria y después a Alabama y recluta de primera ronda para los Raiders, fue documentado en una pieza de la serie "Featured", en SportsCenter de ESPN, en la pasada primavera. "Dormir en el auto, siempre lo recuerdo", dijo Jacobs en su momento. "Siempre será algo que me moldeó en lo que soy. Podría haber sido duro, digo, pero es mi vida".
|
