FRISCO, Texas -- Tras ser reincorporado condicionalmente la semana pasada, el ala defensivo Randy Gregory firmó una extensión de contrato hasta 2021 con los Dallas Cowboys, la cual incluye un bono por firmar de $200,000, de acuerdo a varias fuentes.
Gregory y los Cowboys acordaron una extensión similar la temporada pasada, pero la NFL no la aprobó, porque los jugadores suspendidos no pueden firmar nuevos contratos.
Gregory reportó a The Star por primera vez el lunes pasado para someterse a la prueba para detección de la COVID-19. Podrá participar en las prácticas y juntas, pero podrá entrenar hasta el 5 de octubre. Es elegible para regresar a la acción el 25 de octubre en la visita a Washington. Es elegible para que se le pague su salario al estar en la lista de excepciones del comisionado.
Como parte de su contrato de novato, Gregory tenía programado ganar $955,000, pero esencialmente recibió un bono tras no cobrar su sueldo la temporada pasada. Si está en el roster del día de juego en seis juegos en 2020, ganará hasta $2.1 millones en 2021.
Gregory estaba suspendido indefinidamente por múltiples violaciones a la polìtica de abuso de sustancias de la liga desde su año de novato en 2015.
Perdió toda la campaña pasada tras jugar 14 partidos en 2018 y terminar con seis capturas, segundo total más alto en el equipo. Perdió 30 de 32 duelos de temporada regular en 2016 y 17 por las suspensiones y ha jugado sólo en 28 de 80 posibles encuentros de temporada regular en su carrera.
El coach Mike McCarthy y el coordinador defensivo Mike Nonal dijeron el pasado lunes que, hasta ese momento, no habían platicado con Gregory.
“Estoy emocionado por esta oportunidad y por el capítulo en su vida luego de todo por lo que ha pasado”, dijo McCarthy. “Lo más importante para mí y todos aquí es asegurarnos que (Randy) reciba el apoyo que necesita para conseguir lo que necesitamos conseguir”.