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Philip Rivers y su provocador lenguaje contra los rivales

El mariscal de campo tiene una peculiar forma de vivir el deporte

INDIANAPOLIS – El botón de apagado, cuando se trata de la boca de Philip Rivers, no siempre funciona cuando está en el juego.

El mariscal de campo de los Colts siempre tiene la boca en movimiento. En la línea de banda. Corriendo al campo. Antes de la jugada. Después del silbato.

Y lo más probable es que Rivers hable con los rivales durante esos momentos.

El domingo pasado uno de los intercambios de Rivers se volvió viral cuando fue sorprendido hablando provocativamente con el apoyador de los Chicago Bears, Roquan Smith.

Rivers, después de fallar en dejar a los Bears fuera de juego con un confuso conteo, decidió comenzar a hablar rudo con Smith. El mariscal de campo quería asegurarse de que el apoyador supiera que todos vieron al corredor novato de los Colts, Jonathan Taylor, vencerlo en una ruta al comienzo del juego.

“Te dio la vuelta”, le dijo Rivers repetidamente a Smith, sin ser hiriente ni maldecir.

“Obviamente se hizo mucho durante el último fin de semana”, dijo Rivers mientras Colts (3-1) se preparan para la visita del domingo a los Cleveland Browns (3-1). “Creo que mucho de eso tuvo que ver con el ambiente –estar en un estadio vacío. Realmente se sintió como si estuviéramos en el patio trasero”.

Rivers tiene un historial de hablar así durante los juegos en 17 años de carrera de los cuales, los primeros 16 los pasó con los Chargers. Sus comentarios de ida y vuelta con el oponente a menudo se convierten en favoritos para tener un micrófono encendido durante los juegos. No es sorprendente cuando sus comentarios se vuelven virales, como con sus bromas con Smith.

“El arrepentimiento es probablemente un poco fuerte, pero ciertamente hay momentos en los que dices, ‘¿Qué estoy haciendo?’ Creo que ciertamente hay una línea que no debes cruzar en términos de no ser consumido”, dijo Rivers. “Creo que incluso en mis 20 años se hizo mucho más. He jugado esto desde que era un niño en el patio trasero y siempre lo he jugado de esta manera. Así que no creo que haya un elemento del que no puedas deshacerte. Si no se hubiera grabado algo en video, ni siquiera se le hubiera dado un ‘segundo pensamiento’… se hubiese quedado en ‘buen juego’. ‘Hombre, eso fue divertido’. Luego pasas a lo siguiente”.

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Pero Rivers, de 38 años, no entra en cada partido con el deseo de ser una plaga para sus oponentes. Tiene cosas más importantes de las que preocuparse, como mover el balón por el campo para sumar puntos.

“Les digo a los muchachos todo el tiempo, ‘oigan, todos tienen su propia personalidad. Somos un equipo. Hacemos lo que es mejor para el equipo, pero dentro del entorno del equipo, todos son libres de expresarse en sus pripias formas”, dijo el entrenador de Colts, Frank Reich. “Amamos y apreciamos la competitividad y el fuego de Philip. Es bueno para nuestro equipo y creo que es bueno para el deporte. Philip también es lo suficientemente profesional como para saber cómo trazar la línea. Creo que se ha acercado a esa línea varias veces en su carrera, pero creo que hace un buen trabajo al mantenerse en el lado correcto”.

Lo que hace agradable las provocaciones de Rivers, es que puede hacerlo sin insultos ni palabrotas. Lo mantiene limpio mientras disfruta de cada segundo. Rivers soltará un ‘dadgummit’ ocasional en su sureño acento de vez en cuando.

“(Rivers) es un poco más limpio de lo que quizás (el receptor abierto) Zach Pascal es a veces o (el corredor) Jordan Wilkins a veces”, señaló el coordinador ofensivo Nick Sirianni. “Es solo él siendo él. Así es como juega y así es como funciona. Creo que saca lo mejor de sí mismo cuando hace eso, y sabe lo que le motiva y sabe cómo jugar su juego y eso es solo parte de su juego”.