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Los equipos que cortaron con los títulos del Bayern Munich en los últimos 20 años

En estas primeras dos décadas del Siglo XXI, la Bundesliga fue dominada en su mayoría por un solo equipo que viene haciendo historia en el torneo alemán: el FC Bayern Munich.

El conjunto bávaro conquistó 14 de las últimas 20 y lleva ocho títulos de manera consecutiva.

¿Pero cuáles fueron los equipos que han interrumpido en parte la hegemonía del cuadro muniqués? Entre la temporada 2001/02, solo cuatro equipos pudieron consagrarse en el certamen, obteniendo seis títulos.

El Borussia Dortmund de principio de siglo

En la temporada 2001/02, el Borussia Dortmund pudo ser el primero en consagrarse luego de un tricampeonato del cuadro de Múnich, tras finalizar en el tercer lugar la temporada anterior.

El conjunto negro y amarillo llegó a levantar la ‘Meisterschale’ luego de comenzar una dura pelea con el Kaiserlautern y el Bayer 04 Leverkusen en el inicio de la liga, y tras un bajón entre las fechas 5 y 10, el Dortmund levantó cabeza y se puso segundo, por detrás de las ‘Aspirinas’ durante el resto del torneo.

Pero en la penúltima jornada, todo iba a cambiar, ya que Leverkusen cayó y con una victoria por 4-3 sobre Hamburger SV pudo subirse a la cima. Luego vino un triunfo 2-1 sobre Werder Bremen, que determinó el primer título en mucho tiempo, con una diferencia de un punto sobre su perseguidor.

Los tantos del máximo goleador del torneo Márcio Amoroso, las atajadas de Jens Lehmann, la firmeza en el fondo de Metzelder y el juego del checo Jan Koller, fueron algunas de las claves para que las ‘Abejas’ consigan su tercer título en la Bundesliga.

El Bremen de Haedo Valdez

En la 2003/04, y tras un nuevo título del Bayern Munich, Werder Bremen se encargó de interrumpir que los bávaros logren triunfos de manera consecutiva.

Luego de un comienzo flojo, en donde rondaba por el cuarto lugar, el panorama se volvió claro para los Verdiblancos a partir de la fecha 16, cuando tras vencer al Bayer Leverkusen, se subió a la cima.

Con una racha de 17 partidos sin perder (15 victorias y dos empates), Werder Bremen llegó a la jornada 32 con seis puntos de ventaja, lo que le permitió coronarse como campeón dos fechas antes.

Aílton, el goleador del campeonato, llevó a su equipo al triunfo tras marcar 28 goles, y con el aporte de cinco tantos del paraguayo Nelson Haedo Valdez, el Bremen logró su cuarto título en la historia del fútbol alemán.

La gloria del Stuttgart

Tres años después, en la 2006/07 y un nuevo bicampeonato del Bayern Munich, el VfB Stuttgart fue el encargado de romper con la hegemonía bávara en un torneo que fue parejo de principio a fin.

Los suabos no tuvieron un buen arranque en la competencia, cayendo en los primeros duelos, pero a partir de la séptima jornada mejoraron su performance y rápidamente se metieron en la pelea, oscilando entre el segundo y cuarto lugar.

Hasta que, en el sprint final de la temporada, las derrotas del Schalke 04 en la fecha 33, acompañado de una victoria por 3-2 sobre el Bochum le permitió subirse a la punta del torneo, para cerrar el torneo con tres puntos con un triunfo sobre Energie Cottbus por 2-1 y conquistar un nuevo título para el conjunto rojiblanco.

Con la figura de Pavel Pardo como uno de los referentes, y los tantos del goleador del equipo Mario Gómez, además del aporte de un Sami Khedira que asomaba como crack. Ellos fueron los destacados del conjunto del centro de Alemania.

La primera vez del Wolfsburgo

Tras un intervalo de un año con título del cuadro muniqués, el VfL Wolfsburg sorprendió a todos en Alemania y en la temporada 2008/09 se alzó con el primer torneo de su historia.

Luego de un arranque irregular por parte de los Lobos, en donde el octavo puesto fue una fija en la primera mitad del torneo, los dirigidos por Wolfgang Magath levantaron cabeza en la fecha 19.

Allí encadenaron una serie de 10 partidos ganados de manera consecutiva, lo que los catapultó al primer lugar, puesto que no abandonaron nunca pese a compartirlo en dos jornadas con el Bayern a dos fechas del final. Sin embargo, un empate de los bávaros y victorias consecutivas de Wolfsburgo, derivaron en el gran festejo de la ciudad.

La gran capacidad goleadora del equipo fue uno de los pilares de la conquista de la Meisterschale, de la mano del brasileño Grafite, que se convirtió en el goleador del torneo con 28 goles, seguido por su compañero el artillero bosnio Edin Dzeko, con 26. Además, la firmeza en el fondo de Andrea Barzagli y las atajadas del suizo Diego Benaglio.

El matrimonio perfecto: Borussia Dortmund y Jürgen Klopp

Otra vez un título del Bayern fue el separador entre nuevos campeones y en la 2010/11 llegó el turno del reconocido Borussia Dortmund de Jürgen Klopp, que consiguió el bicampeonato.

Los ‘Black-Yellow’ no comenzaron de la mejor manera la liga, pero tras un par de jornadas victoriosas, llegaron rápidamente a la cima y con un ritmo arrollador y apenas cinco derrotas en todo el torneo, alcanzaron al primero de los dos títulos.

Tal fue la supremacía de los de Klopp, que consiguieron consagrarse dos fechas antes, tras llevar una ventaja de ocho puntos sobre su perseguidor, el Bayer 04 Leverkusen.

Con los goles de Lucas Barrios, la firmeza de la zaga defensiva formada por Subotic y Hummels y el juego de Mario Götze y Shinji Kagawa, Klopp consiguió su primer título como entrenador.

Con un plantel que se mantuvo, y sin grandes salidas, el Dortmund repitió la Meisterschale, siendo el primer equipo por fuera del Bayern Munich en conseguir trofeos de manera consecutiva, desde que el mismo club lo consiguiera en las temporadas 94/95 y 95/96.

Luego de un comienzo con algunas derrotas, que lo tumbaron hasta el puesto once, el equipo de Klopp remontó a partir de la octava fecha y le dio pelea mano a mano al Bayern.

Pese a que los bávaros se consagraron como campeones de invierno, el retorno de la competencia marcó que el Dortmund mejorara en su juego y con ocho triunfos seguidos le arrebató la punta y le sacó una importante ventaja, que sirvió para llegar a la fecha 32 y consagrarse nuevamente con antelación.

La gran figura de este segundo Dortmund de Klopp fue Robert Lewandowski, que se estableció como gran goleador en la Bundesliga, acompañado con la firmeza de Weidenfeller en el arco y la distribución de Ilkay Gündogan en el centro del campo.