<
>

Así sería el fútbol argentino con los cracks que repartió por el mundo

Faixa de torcedores do Newell's Old Boys pedindo para Messi jogar pelo clube Getty

No se trata de imaginarnos al fútbol argentino con un poder económico similar al de las grandes ligas europeas, porque en ese caso habría que hacer conjeturas sobre posibles contrataciones rutilantes y pensar en equipos con hasta once nacionalidades entre los titulares. El ejercicio presentado es plantear cómo estarían compuestos los equipos de la actual Superliga Argentina si los jugadores que formaron, lanzaron al profesionalismo y hoy brillan por el mundo se hubiesen quedado en su club de origen.

En este juego algo arbitrario es muy difícil no comenzar por la fantasía que genera un Newell's con Lionel Messi. Ese hipotético conjunto rosarino también contaría con renombre para mantener el cero en el arco propio. Nahuel Guzmán, Ezequiel Garay, Cristian Ansaldi y Leonel Vangioni armarían una buena muralla defensiva para que Leo y Mauro Icardi se encarguen de hacer magia en el área de enfrente.

Pese a que el título recientemente conseguido fue una gran alegría para los hinchas de Boca, no muchos se negarían a contar con la jerarquía de Leandro Paredes, la zurda de Nico Gaitán y el buen pie de Éver Banega. Otros que vestirían la azul y oro: Wilfredo Caballero, Facundo Roncaglia y Mauro Boselli, entre otros.

Es innegable que River pasa por el mejor momento de su historia, pero sería muy entretenido verlo medirse con un 11 que tenga a Leandro Chichizola en el arco, a una línea de tres compuesta por Germán Pezzella, Eder Álvarez Balanta y Ramiro Funes Mori, a un doble cinco con Matías Kranevitter y Guido Rodríguez, a Lucas Ocampos por derecha, a Manuel Lanzini por izquierda, a Erik Lamela por el centro y a dos delanteros de élite como son Radamel Falcao y Gonzalo Higuaín. A ese banco de suplentes irreal lo conformarían Sebastián Driussi, Augusto Fernández, Roberto Pereyra, Exequiel Palacios y Gio Simeone, por nombrar a algunos.

En este torneo imaginario habría varios candidatos al título. Uno de ellos sería Racing. Chiquito Romero pelearía el puesto con Juan Musso, Gabriel Mercado lideraría la defensa, el mediocampo tendría a un jugador afianzado en la Selección como es Rodrigo De Paul y Maxi Morález estaría encargado de asistir a Roger y Lautaro Martínez.

El otro grande de Avellaneda no se quedaría atrás con la dupla que podrían conformar el Kun Agüero y Ezequiel Barco. Además, Independiente contaría con Oscar Ustari y David Abraham.

Por su parte, San Lorenzo disfrutaría de una dupla central de lujo como Walter Kannemann y José Luis Palomino, además de la jerarquía de Ángel Correa y Ezequiel Chimy Ávila en el ataque. Pablo Zabaleta seguramente llevaría la cinta de capitán.

En la vereda de enfrente a la del Newell's de Icardi y Messi, Ángel Di María y Gio Lo Celso harían que a Rosario Central no le falte ni un poco de fútbol. ¡Qué clásico tendríamos!

Estudiantes de La Plata estaría en condiciones formar un equipazo con Gerónimo Rulli, Juan Foyth, Federico Fernández, Santiago Ascacibar, Joaquín Correa y Guido Carrillo. A unos pocos metros, Gimnasia buscaría hacerle fuerza de la mano de Maximiliano Meza, Lucas Castro y Lisandro Magallán.

Con tantas estrellas en una misma liga, no serían pocos los que se ilusionen con el título al comenzar la temporada. Un ejemplo podría ser Lanús, con Sebastián Blanco y Diego Valeri acompañados por dos futbolistas de Selección como Agustín Marchesín y Guido Pizarro. Al Talleres de Javier Pastore y Cristián Pavón también le tocaría soñar con el campeonato.

Nicolás Otamendi sería el abanderado de los sueños de un Vélez que tendría la posibilidad de armar un excelente mediocampo con Nicolás Domínguez, Santiago Cáseres, Ariel Cabral y el Monito Vargas.

Con el Papu Gómez y el Pipa Benedetto crecería la esperanza en Arsenal de Sarandí; Lucho González, el Kaku Romero Gamarra y el Pity Martínez entusiasmarían a los hinchas de Huracán en el Ducó; Nicolás Tagliafico estaría bien acompañado por Gabriel Paletta y Facundo Ferreyra en Banfield; y seguramente Lucas Biglia no tardaría demasiado en entenderse a la perfección con Alexis MacAllister en Argentinos.

En el ascenso varias figuras buscarían llevar a su equipo a este torneo soñado. Paulo Dybala intentaría devolver a Instituto a Primera; Marcos Acuña y Federico Fazio harían lo propio con Ferro, mientras que Belgrano reuniría a Emiliano Rigoni, Lucas Zelarayán y Franco Vázquez.

Este ejercicio no hace más que demostrar el poder de la cantera albiceleste y el peso que tiene en el fútbol internacional. Son muy pocos los grandes de Europa que no tengan al menos a un jugador argentino en el plantel.