La presencia de cada uno de los equipos que integran el cuarteto de semifinalistas de la UEFA Champions League no es sorpresiva. Barcelona, Inter, Arsenal y PSG tienen la historia y los méritos suficientes para estar a un paso de la final que se disputará el 31 de mayo en Múnich. Lo llamativo es que Real Madrid no sea uno de los cuatro. Toda una rareza. Sin el campeón defensor y máximo ganador de la historia del torneo, con 15 títulos, y una fija en semifinales en los últimos años -llegó en 12 de las últimas 15 ediciones-, la Champions no ofrece un favorito claro. Sin candidato, los cuatro son candidatos.
La ausencia de Real Madrid en el poker de clubes que siguen en carrera por la Champions es llamativa no solo por historia sino por lo invertido en la contratación de Kylian Mbappé, aunque también es consecuencia de la irregularidad e inconsistencia en el juego que caracterizó su temporada. Justamente lo contrario sucede con los cuatro semifinalistas: el Barcelona de Hansi Flick lidera LaLiga con solidez y ya ganó dos títulos en la temporada (Supercopa de España y Copa del Rey), el Inter Simone inzaghi da pelea en lo más alto de la Serie A, el PSG de Luis Enrique ya se consagró campeón en la Ligue 1 y el Arsenal de Mikel Arteta, que no pudo sostenerle el ritmo a Liverpool en la Premier League, fue el verdugo del Madrid en la Champions.
Si bien el Barça aparece un peldaño más arriba en la escalera hacia la gloria, por talento, regularidad y eficacia, no sería una sorpresa si no logra superar a Inter. De hecho, el conjunto catalán bajó su nivel en los últimos encuentros.
Tampoco surge una superioridad concreta en la otra serie: ni Arsenal ni PSG tienen figuras descollantes que ameriten adjudicarles un favoritismo por sobre su rival. Los dos accedieron a esta instancia más por funcionamiento colectivo que por supremacía individual.
La paridad no solo está en los duelos directos sino en el panorama general: ninguna de las dos series presenta un nivel marcadamente superior. Solo la historia inclina apenas la balanza hacia la serie entre Barcelona e Inter, ya que entre los dos suman ocho títulos -cinco los españoles, tres los italianos-, mientras que Arsenal y PSG nunca fueron campeones de Europa.
Barcelona vs. Inter, choque de estilos
Barcelona disfruta de tener la pelota. La posesión, más allá de que ya no es su insignia principal como en las gloriosas dos primeras décadas del siglo XXI, es un factor que determina su juego. Al dominio del juego le agregó verticalidad y vértigo. Cuando sus mediocampistas, con Pedri como referente, se adueñan del balón, el equipo de Flick manda en los partidos. Y si Lamine Yamal y Raphinha están inspirados, como lo estuvieron durante prácticamente toda la temporada, el peligro en el arco rival está siempre latente. Y el poder de fuego de Robert Lewandowski remata, habitualmente con acierto, la tarea.
Inter no desprecia la tenencia de la pelota, pero tampoco se aferra a ella. No se siente incómodo si tiene que defender, incluso replegarse, y luego contraatacar. La búsqueda del juego directo con Lautaro Martínez como foco principal de la ofensiva es una característica sobresaliente del desempeño de los dirigidos por Inzaghi.
El Barça ganó 9 de sus 12 partidos en esta Champions (1 empate y 2 derrotas), y es, por amplia diferencia el equipo más goleador del torneo con 37. El Nerazzurro también consiguió 9 victorias (2 igualdades y 1 caída), pero apenas metió 19 goles. Los números reflejan los comportamientos en el juego.
Arsenal y PSG, en busca de su primera Champions
El par de golazos de tiro libre de Declan Rice en Londres, en el duelo de ida de cuartos de final contra Real Madrid, marcó el rumbo de Arsenal en esta Champions. El conjunto de Arteta concretó la épica clasificación contra el eterno candidato en el mejor torneo de Europa con un triunfo en el Bernabéu. Lo que aparecía como obstáculo principal en busca de la obtención de su primera Orejona, los Gunners los superaron con menos riesgo que el esperado. Si Arsenal, con Martin Ødegaard y Bukayo Saka como figuras y un juego colectivo asimilado y mejorado con el paso de los años, eliminó al Madrid de Carlo Ancelotti, ¿por qué no puede soñar con el título?
PSG dejó atrás los años en los que la contratación de estrellas rutilantes era su prioridad. Luis Enrique construyó un equipo con menos nombres de peso y más sacrificio. Un conjunto con más obreros y futbolistas versátiles. La firmeza defensiva de Willian Pacho, las proyecciones de Achraf Hakimi y Nuno Mendes, el tándem del mediocampo entre Vitinha y Fabián Ruiz, el talento de Khvicha Kvaratskhelia y el joven Désiré Doué, y la mejor versión de Ousmane Dembélé convirtieron a PSG en un conjunto temible.
Arsenal cosechó 9 triunfos, 2 empates y 1 derrota. PSG tuvo un inicio con dudas, tuvo que atravesar los playoffs, pero creció en juego y resultados (8 triunfos, 1 empate y 5 derrotas).
El enfrentamiento previo en esta Champions el 1 de octubre de 2024, con victoria de Arsenal por 2-0 en Emirates, quedó muy lejos en el tiempo. Para este duelo de ida y vuelta no hay un panorama claro.
Todo puede pasar en las semifinales de la Champions. Y eso es lo que las hace sumamente atractivas.