Barcelona atraviesa un momento gris en la temporada. Todo comenzó con la salida inesperada de Iñigo Martínez, se agravó con la seguidilla de lesiones y ahora se profundiza tras la derrota ante PSG (1-2), Sevilla (1-4) y Real Madrid (1-2), y el reciente empate ante Brujas (3-3) por Champions. Los de Hansi Flick han perdido tres de sus últimos siete partidos y el rendimiento preocupa.
Pero surge la pregunta inevitable: ¿es realmente este Barcelona peor que el de la temporada pasada?
En la campaña anterior, el conjunto azulgrana conquistó LaLiga, la Copa del Rey y la Supercopa de España, además de alcanzar las semifinales de la UEFA Champions League. Hoy, en cambio, el equipo muestra fisuras defensivas impropias del campeón.
En LaLiga ha recibido 13 goles en 11 compromisos, mientras que en presente edición de la Champions le han encajado siete tantos en cuatro juegos.
Datos que dejan en evidencia los problemas de Barcelona
El empate 3-3 en Bélgica fue apenas la segunda vez en 15 partidos oficiales que Barcelona encaja tres o más goles. El dato adquiere otra dimensión al compararlo con la temporada anterior: recién en el partido número 31 (el 21 de enero de 2025, ante Benfica por Champions) el equipo de Flick había recibido tres tantos o más.
El contraste es evidente: la solidez que caracterizaba al Barcelona campeón se ha diluido. Ante Brujas, el equipo encajó dos goles en los primeros 20 minutos, algo que no sucedía en Champions desde el 0-3 frente a la Juventus en la fase de grupos 2020-21.
Además, el duelo en Bélgica dejó otro dato curioso. Carlos Forbs, con 21 años y 231 días, se convirtió en el jugador más joven en marcar y asistir en un mismo partido de Champions contra el Barcelona, superando una marca que ostentaba nada menos que David Beckham, en 1998 (23 años y 137 días).
Y no fue un gigante europeo quien lo logró. Fue Brujas, un equipo sin tanto peso histórico, el que aprovechó los desajustes defensivos de un Barcelona irreconocible.
La duda ya no es si el Barça juega bien o mal, sino cuánto se ha alejado del nivel que lo llevó a dominar la temporada pasada.