El presidente de Deportivo Pasto Óscar Casabón señaló a seis jugadores de amaño de partidos. Desde el plantel reclamaron pruebas.
La derrota 2-0 frente al América en casa que lo dejó último en la liga colombiana alteró los ánimos en el club.
El máximo dirigente indicó que tiene sospechas de apuestas deportivas por parte de algunos futbolistas.
“Tengo mucha tristeza y mucha decepción, porque yo ya no los llamo líderes en nuestro equipo, ya no hay líderes. Los pseudo líderes solo sirven para ir a cobrar, no sirven para encarar con verraquera los problemas de verdad como este... Tengo testigos de la reunión que tuve esta mañana con los jugadores y les di el tiempo suficiente, mirándolos a la cara para que hablaran. No recibí ningún tipo de expresión de absolutamente nada. Eso me llena a mí de más tristeza, porque el que calla también es cómplice”, apuntó.
La situación se vendría repitiendo en las últimas jornadas en las que sumó un punto en cuatro partidos. Cayó con Millonarios, Deportivo Cali y los escarlatas. Igualó frente a Santa Fe.
“Yo lo sospechaba desde el partido con Chicó, cuando comenzaron a evidenciarse situaciones de juego raras, diferentes, resultados, cosas que uno no entiende. Después, partido a partido, Medellín, Cali. Que me perdonen la expresión: a mí que me puteen por mis errores, pero que no me puteen, me traten mal y me vandalicen la sede por cosas que nosotros como dirigentes no tenemos nada que ver. Yo estallé", agregó Casabón.
La respuesta del plantel
Uno de los primeros en confrontar las acusaciones fue el capitán Facundo Boné.
“Estamos acá con todos los compañeros del plantel, porque hoy ocurrió algo de mal gusto. Se puso una situación en la cual se generalizó, sobre el tema de las apuestas. Quizás se marcaron a unos compañeros por apuestas, pero nosotros tenemos que salir a responder que si no vemos las pruebas de compañeros apostando, entonces vamos a estar con ellos a muerte. Queremos proponer es que si hay gente apostando, que muestren las pruebas y nosotros mismos nos vamos a encargar de sacarlos del vestuario, pero no ponerse a señalar a compañeros sin siquiera saber si es real o no", resaltó.
Después fue el turno del portero Diego Martínez, muy afectado por la situación. Entre lágrimas, dijo que "fue criado como una persona intachable, con valores, con principios. Y hoy lo que quieren manchar el nombre mío...yo dejo todo en manos de Dios, porque por este equipo he dejado la vida. Me duele que estén haciendo esto conmigo. Me pongo a disposición del que quiera, de la Fiscalía, de la Dimayor de la FIFA, que me investiguen. Me están dañando mi carrera"