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Chile, a hacer valer la experiencia contra Perú en las semis de la Copa América

EFE

PORTO ALEGRE (Enviado especial) -- Hacer valer las dos semifinales ganadas y que la experiencia de las últimas dos Copas América sea un jugador más. Estos serán dos de los principales objetivos de la selección chilena en el duelo ante Perú en Porto Alegre. Si lo consigue, el seleccionado dirigido por Reinaldo Rueda verá crecer sus posibilidades de estar en la gran final del Maracaná.

"Un alto porcentaje de los jugadores ya han vivido esta instancia y la han sorteado. Hay una madurez en lo futbolístico, en el comportamiento, en la inteligencia para descifrar el juego. Es un grupo experimentado, algunos con dos Mundiales, otros con tres incluyendo el juvenil. Esperamos que nos brinden la satisfacción de llegar a otra final", explicó el entrenador de la Roja en la conferencia de prensa llevada a cabo en el Arena do Gremio.

De los once titulares que saldrán al campo de juego el miércoles, siete han jugado desde el inicio las finales de 2015 y 2016. Mauricio Isla, Gary Medel, Jean Beausejour, Charles Aránguiz, Arturo Vidal, Alexis Sánchez y Eduardo Vargas ya conocen las sensaciones de un partido crucial, algo que en este tipo de instancias es capaz de torcer la balanza.

Rueda llegó hace ya casi un año y medio y recién en suelo brasileño logró recuperar el juego que llevó a este grupo a la gloria. El trabajo arduo de este proceso ha dado resultados. "El equipo ha demostrado mística, compromiso con ellos mismos y estuvo a la altura del desafío en esta competencia. Venimos trabajando de la misma forma desde el primer día, con el mismo respeto. Durante la preparación, hubo partidos en los que muchos los que están hoy no pudieron estar. Para fortuna nuestra ahora llegaron en un momento oportuno. El deseo es hacer un partido que nos permita llegar a la final, que es lo que queremos".

Los logros del último lustro han cambiado la idiosincrasia del hincha chileno. Ya nadie se contenta con competir, el objetivo siempre es ganar. En la conferencia previa a la semifinal, Leonardo Jara lo explicó mejor: "Cuando era niño me tocó vivir procesos en los que era complicado ver a una selección ganar. Hoy en día mis hijos me preguntan por Alexis, por Vidal, por Gary. Los ven en los mejores clubes del mundo. Hay una selección que juega bien en todos lados. Y obviamente que las nuevas generaciones crecieron con otra mentalidad. Hoy nos exigen ganar. En eso nos metimos y tomamos la responsabilidad de asumirlo. Renovarse en el éxito es muy difícil pero lo tenemos que hacer".

Rueda comprendió que una de sus tareas es aprovechar la experiencia de su plantel. Sabe que en los próximos años la renovación será un problema, aunque hoy el promedio de edad sea una virtud. "El jugador chileno es como el vino, entre más añejo muestra más madurez y calidad. Quizás hace dos años estos jugadores fueron recriminados, despreciados, se sometieron al escarnio de la crítica. Prácticamente desahuciados de la selección. Tuvieron la capacidad de superarlo y hoy ellos mismos son los que están aquí".

Chile ganó las dos Copas con dos cuerpos técnicos diferentes. Y está ante una semifinal más con otro. La versatilidad para adaptarse a ideas nuevas es otro de los grandes valores del grupo. El técnico colombiano lo sabe. "Para nosotros es enriquecedor llegar a Chile en el momento en el que lo hicimos. Los técnicos anteriores dejaron una buena siembra, una gran cultura de entrenamiento. Y por eso los futbolistas se autoexigen y nos exigen a nosotros. Ya llevamos una larga convivencia y por fortuna está el mismo ambiente de camaradería, de respeto, del comienzo".

Si la generación actual del seleccionado chileno es "de oro", algo similar se puede decir de la peruana, que también ha logrado recuperar la autoestima del fútbol nacional. En el último juego amistoso, que hoy se recuerda y mucho, la Blanquirroja fue muy superior al combinado de Rueda. Es cierto que hubo varios ausentes y que el once no se parece demasiado al que jugará en Porto Alegre, sin embargo es un hecho para tener en cuenta. "Ese día Perú demostró por qué había clasificado al Mundial y expuso su madurez. Es algo que el fútbol peruano venía elaborando desde hace muchos años", declaró el entrenador colombiano.

En cuanto a la alineación que jugará desde el inicio en el Arena do Gremio, no hubo confirmaciones pero sí pistas. Las amarillas de Vidal y Aránguiz no condicionarán su presencia y el resto serán los mismos que jugaron contra Japón, Ecuador y Colombia. "Hay una exigencia por el desafío, por el hecho de no haber clasificado al último Mundial, por ser el último campeón. Todo eso se mezcla para el grupo tenga la respuesta que tuvo", afirmó Rueda y describió el hambre de un grupo de futbolistas al que los títulos les sirven de combustible para ir por más.