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Henry Duarte, de sufrir humillaciones europeas y el dolor de un divorcio, a presumir su licencia UEFA Pro

Detrás de cada persona hay una historia que merece ser contada y, en el caso del entrenador costarricense, que actualmente dirige a la Selección de Nicaragua, Henry Duarte, no es la excepción.

En entrevista con ESPN, Duarte confesó lo que atravesó para convertirse en un entrenador graduado en Alemania. Su camino no fue sencillo, pues tuvo que soportar el dolor de las humillaciones por parte de algunos europeos, le costó un divorcio, la separación de una de sus hijas y hubo días donde trabajaba casi las 24 horas para pagarse los estudios.

“Yo tengo la licencia UEFA Pro y todos los años voy a renovarla. Sé que en Latinoamérica somos pocos los que la tenemos, creo que como tres. A mí me costó mucho esto. Tuve que sufrir, pasar enfermedades, trabajar en asilos de ancianos o prácticamente las 24 horas del día para poder pagarme mis estudios en Alemania. Tuve que hacer una tesis en alemán para graduarme y ocho exámenes”; comentó Duarte.

“Por eso soy un técnico muy exigente, no le regalo nada a nadie, soy sincero y directo porque mi formación me costó soledad, tristeza, un divorcio y un alejamiento de mi primera hija, No soy violento, agresivo o mal hablado, solo no regalo nada. Me encanta la disciplina, el orden, el trabajo sistemático y los equipos que muestran una cara”; agregó.

Aunado a eso, el estratega de 61 años subrayó que nunca se le olvidará el momento cuando hizo su último examen en Alemania previo a graduarse con la licencia UEFA Pro, en el cual estuvieron cinco personas, incluyendo exjugadores que dejaron un gran legado por el viejo continente.

“Hubo un examen donde cinco personas me hacían preguntas, entre ellos: Franz Beckenbauer y Hans Hubert "Berti" Vogts. Eso fue una sorpresa para mí. La primera pregunta fue de “Berti”, me preguntó sobre qué iba a hacer a Alemania cuando había otros jugadores estrella. Yo le dije que acepté una invitación porque quería marcar una historia en mi país y en Latinoamérica, que no me interesaba trabajar en ese país” recordó.

“Los profesores y compañeros de la licencia no me querían porque me estaba preparando con los mejores jugadores de la Bundesliga y de Europa, además creo que mi nacionalidad influía mucho. Se preguntaban quién era yo y de dónde venía. Al final del año todos andaban detrás de mí para ayudarlos”; añadió.

Una vez finalizada la prueba, Duarte pensó que no la había superado debido a las grandes estrellas con quienes se estaba rozando, tanto así que, al terminar, fue hasta la habitación del hotel y empacó sus maletas para regresar a Costa Rica; no obstante, se llevó una gran sorpresa al ver el padrón de los resultados.

“Para mí yo estaba eliminado, no quería ni ver el padrón. Fui a hacer mis maletas y, cuando iba a ver quiénes eran los ganadores, de camino me iban felicitando. Yo me cuestionaba por qué. Entre más me topaba personas y me felicitaban, los latidos de mi corazón se aceleraban. Fui corriendo a ver y cuando me vi de primero, con la mejor nota, me puse a llorar y no podía contenerme”; dijo.

Por su parte, Henry Duarte aprovechó unos minutos para explicar cómo fue que nació su pasión la dirección técnica. Resaltó que todo se debe a don Ricardo Saprissa Aymá (Q. E. P. D), quien lo matriculó para estudiar educación física cuando su deseo era estudiar derecho.

“Cuando llegué a Saprissa en 1977 no había examen de admisión en las universidades, yo estaba haciendo las generales de la UCR en Liberia. Don Ricardo Saprissa nos llevó a Tibás, le pedí que me matriculara en derecho, él me ayudó a hacer las vueltas. Pero me dijo que no había espacio, entonces me matriculó en educación física. Empecé a jugar con el equipo y de ahí nació la pasión por el deporte”; contó

Su contrato con la Selección de Nicaragua finalizará en diciembre de este año, por el momento no sabe qué llegará a realizar; sin embargo, agradece a la Federación Nicaragüense de Fútbol por la confianza y por el esfuerzo que han realizado desde su llegada hace seis años.

“El esfuerzo que hace la federación es ejemplar. Hay mucho orden, buenos conceptos y gente que hace valer el esfuerzo. Ellos me han respaldado, He visto a los muchachos jugar bien al fútbol. No sé si he marcado historia en Nicaragua porque habrá técnicos que lo pueden hacer mucho mejor”; finalizó.