La estadística de goles esperados (xG) se ha convertido en el método estándar para medir la calidad de un tiro a puerta calculando la probabilidad de que éste llegue al fondo de la red. Esta estadística avanzada ha sido adoptada por algunos hinchas, mientras que otros han quedado poco sorprendidos al leer que su equipo tenía, por ejemplo, xG de 0.93 después de un partido. Ahora, LaLiga ha desarrollado su propia estadística de "Probabilidad de Gol" que muestra visualmente el porcentaje de probabilidades de que un jugador marque en cualquier momento de cualquier partido de la Primera División de España, y se ha aplicado a algunos de los goles más asombrosos vistos en la historia del circuito español, convertidos por figuras tales como la ex figura del Real Madrid Cristiano Ronaldo o el ícono del Barcelona Lionel Messi, que vistió la camiseta blaugrana hasta la pasada temporada.
La novedosa estadística creada por LaLiga toma en cuenta las posiciones de los jugadores atacantes y defensores sobre la cancha, entre nueve variables distintas para calcular la probabilidad de que el rematador pueda convertir su oportunidad dentro de un porcentaje entre 0 y 100%.
La distancia entre el atacante y el arco, la cercanía a los defensores, posicionamiento del portero y capacidad del rematador son todos factores que influyen, al igual que la naturaleza de la oportunidad en cuestión: bien sea en el uno contra uno, un simple toque o incluso una volea desde 30 metros.
La estadística de Probabilidad de Gol se creó utilizando un proceso que implicó el análisis de más de 2,000 partidos de LaLiga, para revisar y evaluar más de 20,000 tiros a puerta con la finalidad de estudiar los datos y producir un modelo matemático viable.
Dicho en términos simples, un artillero de clase mundial con el balón a sus pies y una portería abierta a su merced tendrá una Probabilidad de Gol cercana al 100%, mientras que un portero que espera pacientemente del otro extremo de la cancha tendrá probabilidades cercanas al 0%.
La Probabilidad de Gol puede ser calculada en tiempo real y entregada en aproximadamente 30 segundos, permitiendo así la producción de gráficos para repeticiones en transmisiones televisivas en directo. También pueden aplicarse en retrospectiva, permitiéndonos revisar algunos goles clásicos de LaLiga de los últimos 30 años para evaluar con precisión sus probabilidades de convertir.
Alerta de spoiler: ¡Todos convierten!
Cristiano Ronaldo (Real Madrid vs. Espanyol, 2016)
Lionel Messi desafió las probabilidades de gol con este impresionante sombrerito.
Indudablemente, el Espanyol ya estaba harto de ver al Real Madrid a finales de la temporada 2015-16 de LaLiga tras perder por global 12-0 en sus dos encuentros previos. La Casa Blanca ganó ambos compromisos por marcador 6-0, con Cristiano como autor de ocho tantos, los primeros cinco en su partido disputado a principios de septiembre en el Estadio RCDE y los otros tres formando un "hat trick" perfecto en la segunda paliza propinada por el Madrid a finales de enero.
El segundo gol del triplete del astro luso en el Bernabéu llegó al filo del descanso, con Cristiano lanzándose a recibir un pase desviado de James Rodriguez e irrumpiendo hacia el borde del área del Espanyol, perseguido por el defensa Enzo Roco. La Probabilidad de Gol de Cristiano, tras haber sido temporalmente limitado por Roco, fue del 2.6%. Sin embargo, no tardó en subir al 5.3%, cuando el capitán de la selección de Portugal ingresó al área y dejó a su rival en la cuerda floja.
Posteriormente, Ronaldo se vio rodeado por un grupo de tres defensores del Espanyol prestos a recuperar el balón. Sin embargo, volvió a maniobrar dentro de su espacio con un veloz movimiento de pies que le dio una oportunidad de rematar sin obstáculos en una posición central, con 13.8% de probabilidades de éxito. Fue en este preciso momento que un remate con la zurda desbordó al portero Giedrius Arlauskis desde 18 metros de distancia.
Lionel Messi (Real Betis vs. Barcelona, 2019)
Después de perder 4-3 en el Camp Nou a principios de la temporada 2018-19, el Barcelona cobró revancha sobre el Betis al humillarlos 4-1 en el Estadio Benito Villamarín cuando ambas plantillas volvieron a verse las caras a mediados de marzo. Messi mostró su mejor nivel, marcando tres de los cuatro goles del Barça en un "hat trick" que concluyó en el minuto 85 con uno de los mejores tantos de su carrera.
El capitán de la selección argentina inició su incursión desbordando al artillero bético Lorenzo Moron, que retrocedió en un intento de ayudar a su defensiva. Messi hizo un sencillo pase a Ivan Rakitic por el lado izquierdo del área y se puso a disposición para hacer un rápido pase de vuelta. Messi se encargó de hacer un remate perfecto sobre las cabezas de seis jugadores y del travesaño del Betis. Tal como la ocasión de Cristiano antes mencionada, la Probabilidad de Gol del 7.1% no es tan alta para un remate tan extraordinario como el de Messi y su estatus de atacante de Categoría 3.
Diego Costa (Atletico Madrid vs. Getafe, 2013)
Un factor clave de la campaña del Atlético que los llevó a alcanzar el título de la temporada 2013-14 fue la impresionante producción goleadora de Diego Costa, que marcó 27 veces en apenas 35 partidos de liga a favor del intratable plantel de Diego "Cholo" Simeone en su camino al campeonato. El delantero oriundo de Brasil convirtió su decimocuarto tanto de la temporada contra el Getafe en partido disputado en noviembre en el Estadio Vicente Calderón, el quinto en la goleada 7-0 de su equipo sobre los Azulones.
Costa se encontró en una posición algo incómoda cuando un centro de Gabi desde la banda derecha encontró al artillero en el centro del área del Getafe, cayendo por detrás de él y por encima de la altura de su cabeza. Costa no tuvo otra opción que lanzarse al aire para contorsionar su cuerpo y conectar un instintivo tiro por encima de su cabeza que tenía 6.2% de probabilidades de entrar en el punto de contacto. Obviamente, el disparo acrobático desbordó al portero del Getafe Miguel Ángel Moya, que no pudo hacer otra cosa que quedarse clavado en su puesto, viendo incrédulo cómo la red volvía a abultarse.
Sergio Ramos (Barcelona vs. Real Madrid, 2007)
Con la campaña 2006-07 entrando a su fase final, el Barcelona se enfrentó al Real Madrid en el Camp Nou en marzo, desesperados por un triunfo vital en el Clásico. Una cascada de goles llegó en los primeros minutos con ambos equipos empatados 2-2 para la primera media hora del encuentro gracias a los dobletes de Ruud van Nistelrooy (5' y 13') para la causa madridista y Messi (11' y 28') para el Barça.
No fue hasta el minuto 73 que la Casa Blanca volvió a asumir el dominio con un gol de Ramos para dar ventaja 3-2 a los visitantes. Guti envió un tiro libre desde la derecha hacia el área del Barça que se topó con el característico cintillo del defensor madridista Ramos, que en realidad miraba hacia Guti de espaldas a la portería y bajo la presión del central barcelonista Carles Puyol. A pesar de la baja Probabilidad de Gol del 2.8%, éste pudo convertir con un cabezazo a la inversa que desbordó a Víctor Valdés para entrar en el arco. Este golazo no fue suficiente para el Madrid: un tercer tanto de Messi en el minuto 91 (sellando su primer "hat trick" con el club blaugrana) hizo que el palpitante choque terminara en empate 3-3.
Damian Suárez (Getafe vs. Espanyol, 2018)
El Getafe ascendió hasta quedar entre los ocho mejores de LaLiga gracias a una cadena de resultados decentes para el último tercio de la campaña 2017-18, con un triunfo 1-0 de local sobre el Espanyol en marzo que desató una racha de cinco triunfos para los Azulones en sus últimos siete compromisos. El único gol del partido se originó en una fuente improbable como lo fue el lateral derecho Suárez, que convirtió su primer tanto con la camiseta del club (desde entonces ha sumado tres goles en 244 apariciones) de forma sumamente espectacular.
Faycal Fajr cobró un tiro libre a 30 yardas de distancia del arco del Espanyol para que Suárez lo rematase. Y vaya que lo remató: el lateral derecho uruguayo despachó un tiro imparable hacia la esquina superior. En el momento en que Suarez hizo contacto con el balón, su Probabilidad de Gol era de apenas el 2.2% debido fundamentalmente a la distancia, junto con el total de 17 jugadores de ambos equipos que se interponían entre el tirador y la portería. No obstante, el disparo pasó por encima de la barrera, de un defensa y del portero del Espanyol Vicente Guaita.
Chimy Ávila (Athletic Club vs. Huesco, 2018)
El recién ascendido Huesca dejó para muy tarde un dramático empate ante el Athletic de Bilbao al inicio de la campaña 2018-19. Ávila, artillero argentino recibido en cesión por el club, solo llevaba 10 minutos en la cancha cuando convirtió su primer gol en LaLiga.
Después que el balón rozara el borde del área del Athletic, llegó a los pies de Ávila, que lo levantó por encima de su cintura con el pie derecho, pivotó 180 grados y lanzó una volea perfecta con su zurda que desbordó a Unai Simon y se coló por debajo del techo de la red. Considerando la dificultad de su técnica y su relativamente modesta producción goleadora hasta ese momento, se calculó que Ávila tenía 1.9% de probabilidades de éxito con su audaz esfuerzo.
Roberto Carlos (Tenerife vs. Real Madrid, 1998)
El encuentro de liga entre Real Madrid y Tenerife en agosto de 1998 persiste en el recuerdo de muchos por dos razones: primero, la Casa Blanca perseguía el título y sufrió una sorpresiva derrota 4-3 en las Islas Canarias a pesar de tomar ventaja en dos ocasiones; y segundo, pudimos ver en dicho partido uno de los goles "imposibles" de Roberto Carlos. El lateral izquierdo brasileño requirió de menos de un minuto tras el inicio del segundo tiempo para igualar el marcador con un enfático remate que parecía desafiar las leyes fundamentales de la física. Tras perseguir un balón por la banda izquierda, Roberto Carlos sorprendió a todos al rematar desde un ángulo casi inexistente en vez de centrar. El disparo desbordó al portero del Tenerife Marcelo Ojeda para entrar por el segundo palo.
La aplicación de la fórmula de Probabilidad de Gol creada por LaLiga sugiere que, si bien el gol de Roberto Carlos no fue estrictamente imposible en sentido lateral, logró superar un 1.8% de probabilidades de éxito al punto de contacto. Una combinación entre un ángulo tremendamente preciso, la distancia con el arco y el hecho de que logró desbordar al portero implica que el zaguero madridista debía lograr una hazaña verdaderamente notable si quería anotar a la primera.
Ronaldinho (Barcelona vs. Sevilla, 2003)
El Barça tuvo que recurrir a un momento de inspiración de su genio brasileño para rescatar un punto del partido justo cuando se acercaba la hora de juego. Ronaldinho, de 23 años y recién llegado del Paris Saint-Germain, convirtió su primer gol competitivo para la causa del Barcelona en su primer encuentro jugando de local, dándole a los fieles culés congregados en el Camp Nou un deslumbrante abrebocas del entretenimiento que disfrutarían durante los próximos cinco años.
Ronaldinho salió de su propio campo y desbordó a dos defensores del Sevilla antes de rematar aproximadamente a 30 metros de distancia con un escaso 1.5% de probabilidades de éxito. A pesar de su posición central, la Probabilidad de Gol de Ronaldinho se redujo considerablemente debido a la distancia de la portería, la proximidad de tres defensores ubicados directamente frente a él y el arquero detrás de ellos. Sin embargo, una conexión perfecta hizo que el remate de larga distancia cayera en picado antes de estrellarse con el travesaño.
Rivaldo (Barcelona vs. Valencia, 2001)
Uno de los mejores goles individuales anotados por un jugador del Barcelona. El absurdo remate de Rivaldo para sumar un "hat trick" contra el Valencia a finales de la temporada 2000-01 fue el punto culminante de una de las más grandes actuaciones individuales de todos los tiempos. El Barça, que ocupaba el cuarto puesto, requería ganar de local contra Valencia (quinto en la tabla) en el último encuentro de la campaña de liga para sellar su clasificación a la Champions. Y lo lograron gracias a su maestro brasileño.
El marcador estaba igualado 2-2 cuando se acercaba el minuto 90. Rivaldo recibió el pase de Frank de Boer en el borde del área del Valencia. Mientras el balón flotaba torpemente sobre su cabeza, Rivaldo buscó en su caja de trucos para hacerse con un último golpe maestro. Con el balón por encima de su cabeza y un bloque defensivo de cinco rivales interponiéndose entre él y la portería, la Probabilidad de Gol de Rivaldo para desbordar a Santiago Cañizares con cualquier remate desde dicha posición era de apenas 1.1%. Un remate supremamente ejecutado con la diestra por encima de la cabeza y el Barcelona aseguró su pase a la siguiente edición de la Champions gracias casi únicamente a los goles número 21. 22 y 23 de Rivaldo en dicha temporada.
David Villa (Deportivo La Coruna vs. Valencia, 2006)
Villa causó gran impresión en su temporada debut con el Valencia, marcando 28 goles en 47 apariciones con Los Che tras su llegada proveniente del Real Zaragoza por €12 millones en el verano de 2005. El mejor de sus tantos en dicha campaña (y muy probablemente el mejor marcado por "El Guaje" en toda su trayectoria) se produjo en la Fecha 22 de la campaña 2005-06.
El Valencia era segundo en la tabla de LaLiga a finales de año y luchaba por seguirle el ritmo al Barcelona y Real Madrid, que se encontraban en la cima. El plantel de Quique Sánchez Flores aprovechó un destello de improvisación de Villa cuando el artillero tuvo el balón a sus pies justo sobre la línea de mitad de cancha. Después de dar un toque para alejarse de su defensor rival, Villa encontró una fracción de segundo para mirar hacia arriba, ver al portero del Depor José Francisco Molina fuera de su línea y apuntar a 55 metros de distancia.
No sorprende ver que Villa tenía apenas 0.5% de Probabilidad de Gol debido a la gran distancia que debió recorrer su remate, junto con el hecho de que la mayoría de los defensores del Depor estaban en su posición y Molina se mantenía entre los palos, técnicamente hablando. Sin embargo, eso no parecía importar mucho cuando Villa y el resto de sus compañeros celebraron jubilosos en el suelo segundos después.