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Lionel Messi, el nombre pendiente

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El Barcelona despide a Piqué con victoria en el Camp Nou (6:17)

En el último partido como profesional del histórico Gerard Piqué, el equipo de Xavi Hernández consigue un cómodo triunfo sobre el Almería y duerme como líder. (6:17)

Leo Messi --aunque fuera de la convocatoria-- vivía las horas previas al partido del PSG en Lorient mientras la grada del Camp Nou en pleno coreaba, entregada, el nombre de Gerard Piqué en su partido despedida del Barcelona. El central catalán tuvo el adiós que merecía su carrera como hace cuatro años y medio, un 20 de mayo de 2018, lo disfrutó Andrés Iniesta o también en mayo, pero de 2015, lo protagonizó Xavi Hernández.

Carles Puyol, quien en marzo de 2014 anunció su retiro por el drama que le perseguía con las lesiones, se despidió con una simple rueda de prensa dos meses después y más en silencio fue la marcha de Víctor Valdés, también en mayo de 2014... Con la esperada salida de Sergio Busquets al acabar esta temporada (apenas nadie imagina que el mediocentro pudiera renovar), se cerrará el círculo. Ya no quedará nadie de aquel Barcelona legendario que el 27 de mayo de 2009, en Roma, conquistó la que era tercera Copa de Europa del club y cerraba la temporada perfecta con un triplete que daba paso al mejor equipo que se ha visto en el fútbol moderno.

Piqué cerró un círculo imperfecto el sábado con una fiesta a la altura del personaje que ha personalizado a lo largo de catorce años. Le contemplan 616 partidos y 30 títulos en azulgrana, solo por detrás de Messi (35) e Iniesta (32) e igualado con Busquets... Y quedando la sensación, después de toda la algarabía que se disfrutó en el Camp Nou, que algo falta para homenajear como realmente merece ese equipo legendario. Falta, claro, el adiós de Messi.

HOMENAJE PENDIENTE

A dos semanas del inicio del Mundial de Qatar y a siete meses de acabar la temporada oficial el futuro del astro argentino es una incógnita. Tiene sobre la mesa una oferta de renovación del PSG y las puertas abiertas del Inter de Miami... Y, también, las de un Barça donde su presidente, Joan Laporta, no cesa de proclamar su deseo de que regrese para de esta manera) acabar su carrera en el club de su vida.

Encajar, suponer y desear, el retorno de Messi al Barcelona es hoy por hoy una quimera. Centrado en Qatar, el argentino aplaza hasta la conclusión del Mundial cualquier decisión y aunque se entiende muy complicado que pudiera recuperar su relación con el presidente que un caluroso día de agosto de 2021 le cerró sorprendentemente la puerta a su continuidad y, más aún, imaginarle otra vez vestido de azulgrana, lo que no se comprendería es que Leo se retirase como futbolista sin recibir el calor, ovación y homenaje sentido, de ese Camp Nou en el que pasó la mayor parte de su vida deportiva.

El Barcelona tiene una deuda pendiente con Leo Messi y más allá de plantear un hipotético regreso como futbolista está obligado, moralmente, a despedir con todos los honores a quien fue primero la guinda del pastel de un equipo de leyenda y después, muy a pesar suyo, el jugador que lideró la supervivencia del club entre los grandes y le mantuvo a flote futbolísticamente en los momentos menos agradables durante la lenta pero inexorable caída dela cúspide.

Si Piqué disfrutó, merecidamente, de un adiós a la altura de su personaje, el Camp Nou le debe a Messi una despedida por todo lo alto y sea coincidiendo con un partido frente al Almería o ante cualquier rival, el aficionado azulgrana debe tener la oportunidad de agradecerle con una fiesta inolvidable lo que ha significado en la historia del Barça.