Hace menos de un año, el 29 de mayo de 2024, Barcelona anunció oficialmente la contratación de Hansi Flick como nuevo entrenador. La salida de Xavi Hernández llegó tras una temporada sin títulos, marcada por derrotas dolorosas: un 4-1 ante Real Madrid en la Supercopa de España, una eliminación en cuartos de Copa del Rey con un 4-2 frente a Athletic Club, y el humillante 3-5 ante Villarreal, noche en la que Xavi pronunció su famosa frase: "Quiero anunciar que el 30 de junio dejaré el club".
El Barcelona de Flick, una mentalidad de remontada
La transformación más visible del efecto Flick ha sido la mentalidad ganadora del equipo. El Barcelona actual entra al campo con la convicción de ser el mejor. Incluso en situaciones adversas, como el Clásico en Montjuïc donde iban perdiendo 0-2, pero en el ambiente estaba la sensación colectiva de que podían remontar. “No ha sido fácil, pero la mentalidad de este equipo es increíble”, declaró Flick tras el vibrante 4-3 ante el Madrid, una victoria que los acercó a su tercer título de la temporada.
Una de las tareas tácticas que más trabajó el estratega bávaro fue alinear a los defensores con su propuesta de presión alta. “Con Xavi jugábamos con la defensa adelantada, pero no tanto como con Flick. Ahora la presión es mucho más intensa”, reconoció Ronald Araujo. No es casualidad que en la Supercopa de España, que el Barça ganó 5-2 al Madrid, los blancos cayeran 16 veces en fuera de juego.
Este planteamiento agresivo tiene riesgos: expone la defensa y puede costar goles. Pero lo notable es que el equipo no se desmorona cuando esto ocurre. Todo lo contrario. “Vimos que estábamos 0-2 y nos dijimos: ‘Es nuestro momento’. Sabemos que tenemos todo para remontar”, expresó Lamine Yamal.
En cifras, Barcelona ha recibido 36 goles esta temporada, 10 más que Athletic Club, pero también ha anotado 97, el equipo más goleador de Europa.
Durante los últimos cinco años, el club ha tenido cuatro entrenadores: Setién, Koeman, Xavi y ahora Flick. En ciclos anteriores, en partidos complicados el equipo solía venirse abajo. Curiosamente, esta resiliencia era una de las señas de identidad del Real Madrid, que en la temporada 2023-2024 ganó LaLiga con 95 puntos, 10 más que el Barça.
En la presente temporada, Barcelona ha logrado remontar nueve partidos en LaLiga, comenzar perdiendo un partido no parece ser un problema para el sucesor de Xavi.
Para ser campeón: más táctica, mayor músculo
El éxito de Flick en Bayern Munich fue su carta de presentación, pero su historial como asistente de Joachim Löw en la Alemania campeona del mundo en 2014 también pesa. En Barcelona, sin grandes fichajes -solo Dani Olmo y Pau Víctor-, cambió el enfoque del entrenamiento: menos balón, más táctica y físico.
Uno de los problemas del Barça era el bajón en los últimos minutos, un tema tanto físico como mental. “Ahora trabajamos mucho más, mucho más duro que antes", explicó Pedri y agrefó: "El nivel del equipo no baja después del minuto 70".
La llegada de Julio Tous como jefe de preparación física reforzó esta transformación. Los jugadores aumentaron su tiempo en el gimnasio. "No se puede entrenar como hace diez años", afirmó Robert Lewandowski, en una crítica velada a la etapa anterior.
Marc-André ter Stegen también lo dejó claro: los entrenamientos ahora son “superfuertes” y la exigencia es estar físicamente por encima de cualquier rival.
Flick vs. Xavi: las diferencias como entrenadores de Barcelona
Cero excusas: ni césped ni sol
Bajo la dirección de Flick, desaparecieron las excusas. Xavi, en cambio, fue blanco de críticas por sus declaraciones en momentos difíciles. “Vamos a intentar competir con el Madrid. La situación económica es muy difícil”, llegó a decir. También se quejó públicamente del estado del césped o los horarios de los partidos. “¿Me molesta el sol? Sí, me molesta el sol y no voy a cambiar de opinión”, dijo tras otra rueda de prensa polémica.
El estratega alemán ha optado por un perfil bajo: ruedas de prensa breves, sin polémicas, sin entrevistas mediáticas. El ruido bajó del cielo a la tierra.
Cero rumores: sin hablar de fichajes
Xavi también generaba titulares hablando de jugadores de otros equipos, como Bernardo Silva, lo que alimentaba rumores y tensaba relaciones con clubes como Manchester City. “Siempre sale que el Barça quiere jugadores del City, no al revés”, dijo Pep Guardiola en su momento.
Flick ha sido tajante: "De eso se encarga Deco, yo me encargo de los entrenamientos". Su discreción ayuda a mantener la unidad del vestuario y evita distracciones innecesarias.
Barcelona y Flick supieron sobrevivir a su peor momento
"Lo positivo es que noviembre ha acabado y empezamos diciembre", destacó Flick en su primera crisis de resultados con Barcelona en LaLiga. Durante noviembre de 2024, Barcelona atravesó una racha complicada en el torneo, con una derrota ante la Real Sociedad (0-1), un empate frente al Celta de Vigo (2-2) y otra caída contra Las Palmas (1-2). Barça, con un Lamine Yamal lastimado dejaron de ser imbatibles en España, mientras seguían triunfando en la Champions League.
En diciembre la historia no cambió tanto, sufrieron dos derrotas en casa: el 15 diciembre ante Leganés y el 21 ante Atlético Madrid. Los azulgranas, que llegaron a tener una ventaja sobre Real Madrid de nueve puntos, comenzaron el 2025 en el tercer lugar de la tabla: el Atlético lideraba con 44, los blancos eran escoltas con 43, y Barcelona tercero, a dos puntos del líder. Pero los chicos de Flick tuvieron un 2025 de ensueño, con solo dos derrotas hasta la fecha: contra el Borussia Dortmund (1-3) en la vuelta y el Inter de Milán en prórroga (4-3). El resto fueron victorias para lograr volver a la cima y subir de nuevo a lo más alto.
Flick sacó la mejor versión de Barcelona
Tras la salida de Sergio Busquets, muchos se preguntaban quién sería el nuevo “5” del Barça. Flick apostó por Marc Bernal, quien tuvo un gran arranque antes de lesionarse. Luego, llegó el turno de Marc Casadó, quien rindió a buen nivel hasta el regreso de Frenkie de Jong, que bajo el mando del alemán alcanzó su mejor versión desde que llegó al club hace seis años.
Ante la lesión de Ter Stegen, el polaco Wojciech Szczęsny fue clave. Flick no dudó en sentar a Iñaki Peña para darle plena confianza. Con Lewandowski como líder, le brindó protagonismo a Ferran Torres, ‘el Tiburón’ vive su mejor campaña desde que llegó. Además su manejo con Lamine Yamal ha sido impecable, al igual que la recuperación de Gavi tras una grave lesión.
Flick también cambió la posición de Pedri y confió en Fermín, quien suplió con creces las ausencias de Dani Olmo. Alejandro Balde volvió de una larga inactividad con más potencia física, explotando su velocidad. Ronald Araújo fue relegado por Íñigo Martínez y Pau Cubarsí, en una muestra del rigor meritocrático del técnico. Jules Koundé se convirtió de los mejores laterales derecho del mundo, hasta que una lesión lo dejó fuera del tramo decisivo de la temporada.
Pero la obra maestra fue Raphinha. De estar en la puerta de salida pasó a ser candidato al Balón de Oro con 34 goles y 25 asistencias en todas las competiciones. También respondieron jugadores de rol como Eric García, que regresó tras una etapa gris y se convirtió en un todoterreno, cumpliendo en varias posiciones: central, lateral y mediocentro.
La mayor esperanza para el Barça es que este equipo aún no ha tocado techo y Flick lo sabe: “Tenemos un equipo muy joven, que aún tiene mucho por aprender, pero con mucho talento y profesionalismo. Estoy entusiasmado por lo que viene”.