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El Barcelona no agota entradas entre sus socios para final de Copa

BARCELONA -- El FC Barcelona cerró el periodo de inscripción entre sus socios para solicitar boletos para la final de la Copa del Rey sin agotar las cerca de 15 mil localidades puestas a disposición, un hecho excepcional en el pasado pero que se ha repetido por segunda temporada consecutiva.

La final se disputará el 25 de mayo en el estadio Benito Villamarín de Sevilla y al cerrarse el plazo de solicitud la demanda por parte de los socios del Barça alcanzó las 11,792 localidades, sobrando 2,760 del total de 14,552 puestas a disposición por el club, por lo que no tuvo que llevarse a cabo ningún sorteo y los boletos sobrantes, según anunció la propia entidad azulgrana, se repartirán entre las peñas andaluzas.

La proximidad de la final de la Champions League, que se disputa al cabo de una semana, el primero de junio en Madrid, y la posibilidad de que el Barça de Valverde pueda tomar parte en ella se contempla como una de las razones para explicar esta fría acogida ante la Copa del Rey, una final que, además, el equipo azulgrana ha disputado consecutivamente en las cinco últimas campañas, ganando las cuatro postreras, y siendo protagonista en ocho desde 2009.

“La final de Copa no ilusiona tanto como la de Champions y muchos, teniendo que elegir, arriesgamos a esperar a la final de Madrid”, explicaron a ESPN colectivos de socios que, además, pusieron especial énfasis en el precio de los boletos y los desplazamientos tanto a Sevilla como a Madrid para razonar esta baja demanda en cuanto a la final de la Copa del Rey.

Los precios de los boletos en la final de Copa se sitúan entre los 55 y los 180 euros, mientras que la final de la Champions, a disputar en el Wanda Metropolitano, tiene un pequeño paquete de localidades a 69 euros... Pero a partir de ahí se disparan hasta los 150, 300 y 449. Si a todo ello se suma el viaje y, más aún, una estancia que en las fechas de los partidos provocará un aumento considerable en los precios de los hoteles, es razonable el freno en muchos aficionados.

También se explica el descenso de solicitudes en el cambio que el año pasado puso en marcha el club para frenar en la medida de lo posible la reventa. Si en temporadas anteriores siempre se agotaban las solicitudes y gran cantidad de socios, o personas que habían logrado una entrada en el sorteo gracias a un carnet ‘prestado’, hacían negocio revendiendo por altas cantidades las localidades asignadas, desde 2018 el Barcelona exige la presentación del documento personal junto al carnet de socio, siendo los boletos nominales y, por tanto, mucho más difíciles de revender.