MADRID -- Zinedine Zidane aprovechó la rueda de prensa previa al partido que el Real Madrid jugará contra Osasuna para disipar cualquier tipo de problema con Gareth Bale y para romper una lanza a favor de Marcelo por todas las críticas suscitadas tras la eliminación en Copa del Rey contra la Real Sociedad.
"Está aquí y estamos contentos con todos los jugadores. Tengo que hacer una convocatoria y no hay ningún problema. Vamos a contar con él. Él quiere pelear. Lo de dentro se queda dentro. Es un jugador nuestro. No hay ningún problema porque tiene contrato y él quiere quedarse".
El galés, a pesar de estar recuperado y haber entrenado con el grupo, se quedó fuera de la lista de convocados en el partido del jueves contra la Real Sociedad. Por eso Zidane quiso restar importancia a su ausencia del jueves y dejó entrever que puede viajar a Pamplona.
"Puede entrar en la convocatoria y está listo para jugar. No es un toque de atención que no haya ido convocado. Los jugadores tienen que estar al 100% para jugar. No hay solución con Bale porque no hay ningún problema".
Zinedine Zidane, además, quiso mimar públicamente a Marcelo, quien se convirtió en el principal foco de las críticas de la afición durante la pasada semana. Incluso, y tal y como fuentes confirmaron a ESPN, el descontento con el brasileño también se extendió por el seno del mismo club. Por eso Zidane afirmó que le duelen las críticas a su jugador, tirando del mismo discurso protector que utiliza el francés desde el principio de temporada.
“Sí, claro que me duelen (las críticas). Son jugadores que lo dan todo en el campo. Me duele a mí y a los jugadores también porque ellos lo dan todo en el campo y la afición, que es lo más importante creo que lo ha visto, es justa. Perdimos y no estamos contentos con la eliminación, pero ellos han visto que hemos dado todo. Llevábamos 21 partidos sin perder y ahora hay que volver a eso otra vez. Dar el cien por cien, estar positivo, porque lo de fuera no ayuda. Lo veo bien. Cada uno puede opinar, pero Marcelo es un jugador importante y lo va a demostrar”.
Otro de los debates de la semana es el de Casemiro. Su ausencia se notó en Copa del Rey de una forma excesiva, pero Zidane quiso restar importancia a la baja del brasileño porque “esto es un equipo”. Por último, el técnico francés admitió también que la eliminación dejó un poso de descontento importante en el vestuario y no quiere que se repita en Liga frente a Osasuna, partido que Zidane describió como “una final”.
“Es un partido complicado en un campo complicado, lo están haciendo muy bien. Sabemos las dificultades, pero estamos preparados para darlo todo y hacer un partido fuerte. Es otra final”.