Nota de AUF a Federico Valverde, publicada el 17/4/20, en la cual el mediocampista habla sobre su relación con Zinedine Zidane.
Federico Valverde, volante del Real Madrid y la selección uruguaya, dijo en una entrevista al Instagram de la AUF que ponerse la camiseta celeste “es lo mejor que puede haber”.
“Cada vez que te pones la camiseta de Uruguay es un momento hermoso. En los partidos, siempre se me pasa mi familia por la cabeza, que es la que luchó conmigo desde el minuto uno”, comentó.
El futbolista merengue recordó sus comienzos como espectador de fútbol y dijo que uno de los primeros recuerdos internacionales que tiene es el Mundial de Alemania 2006, en el que recopilaba datos, demostrando una pasión por la pelota. “Lo seguí muy bien y tenía esa pasión por el fútbol, que cada partido anotaba los goles, cómo salía. Me encantaba. Mi madre guardó un cuaderno donde anotaba todos los campeones durante años y tenía todas las estadísticas”, añadió.
Valverde también habló de la noche en que debutó con la selección mayor, ante Paraguay en un partido clave por Eliminatorias. En ese momento, compartía habitación con Sebastián Coates, y el defensa fue quien se encargó de calmar sus nervios.
“Siempre le voy a agradecer cómo me trató en esos momentos. El día anterior al partido, no sabía qué hacer, ya sabía que iba a jugar y mis nervios me estaban consumiendo. Seba me hablaba mucho, me decía que estuviera tranquilo, me cambiaba de tema así me olvidaba un poco del partido. Íbamos a otra habitación a compartir una charla o un mate con los compañeros. Nos fue a visitar ‘Palito’ Pereira y le contamos que podía jugar de titular y me agarró para la joda, y yo me puse peor. Me decía: ‘no te pongas nervioso’, o ‘tranquilo, Fede’, ¡y eso era peor! ¡Yo tenía unas ganas de dormir y despertarme en el partido! Me divertí mucho con Seba y los otros compañeros”, comentó.
El exPeñarol también habló de cuando se enteró que sería jugador de Real Madrid. Estaba jugando un partido con la selección sub-17 ante Argentina y le avisaron que había ojeadores del equipo madridista. “Yo era muy chico, a veces por inmadurez decís que no importa. Yo voy a jugar por mi pasión que es el fútbol, amo el fútbol, y porque jugás por tu país que es lo mejor que puede haber, y te olvidás de lo que dicen, de los ojeadores. Jugué muy bien, ganamos, y después nos encontramos con el ojeador y resultaba que me quería. Estuve días y días antes del Sudamericano en los que no caía, me giraba en la cabeza si era verdad o si era una broma. Hasta que dije: ‘voy a hablar con mis padres para que me digan la verdad’ porque pensé que me estaban mintiendo. Y al ver a mi madre feliz, llorando de alegría porque podía cumplir uno de mis sueños, ahí me cayó la ficha de que un club tan grande, de los mejores del mundo, me quisiera. Fue lo mejor que me pudo haber pasado”, explicó.
Su entrenador en el Real Madrid es nada menos que Zinedine Zidane. Respecto al astro francés, Valverde dijo que “te hace sentir con la confianza que no cualquier entrenador te hace sentir”. Dijo que el entrenador lo aconseja en cada movimiento y jugada y le habla a los jugadores constantemente. “Te habla y uno le tiene un respeto muy grande, porque además de entrenador es una leyenda a nivel mundial. Entonces todo lo que te dice hay que guardarlo en la cabeza porque es todo para bien. En algunos partidos se acerca a corregirte algo o darte una indicación y es todo para bien. O una crítica también, si la dice él, tenés que escucharlo, aprender y sacar el mayor fruto posible”, indicó.
El volante también eligió jugadores en su posición de La Liga española que le guste ver. Optó por Martin Odegaard, futbolista merengue cedido a Real Sociedad; Dani Parejo, del Valencia; y el uruguayo Mauro Arambarri. “Me gusta destacar a los que hacen bien las cosas, que van por el buen camino, a los que luchan. Es un jugador que lo miraba en la sub-20 de Uruguay, yo era más chico e iba al estadio a verlo, me encantaba verlos a Nández y él en el medio. Esa lucha, esas ganas, esa visión que tiene son admirables”, indicó sobre el volante del Getafe.