<
>

Evolución de las posiciones en el futbol: Del líbero a los centrales en línea

BARCELONA -- Franz Beckenbauer es el líbero por excelencia. Fue el jugador a través del cual el Bayern Múnich y la selección alemana adquirieron una nueva dimensión, posicionándose junto al central, por detrás como cierre cuando era necesario, por delante para iniciar el juego de ataque… Una pieza fundamental. Y que hoy es solo un recuerdo de un fútbol devorado por el tiempo.

A Matthäus le reconvirtió a la posición el Kaiser en su edad madura para dirigir a la Alemania Federal que conquistó el Mundial de 1990, cuando el puesto empezaba a ser puesto en cuestión, porque en la última década del pasado siglo y siguiendo las enseñanzas del fútbol total que había puesto en órbita Holanda, los equipos, las selecciones, fueron habituándose a los centrales en línea a medida que se instauró la táctica del fuera de juego. Y avanzar la posición para dejar en orsai al rival provocaba que el líbero, en su labor de defensa de cierre, perdiera su razón de ser.

Fueron legendarios esos nombres como lo fueron Bobby Moore, Billy Wright o Daniel Passarella, que mezclaban tanto su labor de cierre, conocida en su tiempo bajo el nombre de defensa escoba, como de encargado de ligar el juego desde atrás, cuando no de, tal expresa el nombre, ser el futbolista libre de la zaga para encimar al rival que no tuviera un marcaje concreto.

En la actualidad el líbero no existe como tal. El campo, el juego, se fue haciendo más estrecho, se acortaron las líneas y se impusieron las parejas de centrales, con un líder que fue Baresi, uno de los primeros que se readaptaron a la nueva labor, que fueron Cannavaro o Puyol, que son Sergio Ramos o Piqué…

Jugadores con capacidad para liderar la defensa, a menudo reconvertidos de otras posiciones y que trasladaron al puesto de central su buen manejo del balón, además de su colocación, agilidad en leer la jugada rival o la rapidez en descolocar el ataque saliendo a provocar ese fuera de juego tan habitual en nuestros días.