BARCELONA -- El Barcelona recibe este sábado al Alavés en el Camp Nou con un ojo puesto en la Champions, atento al Paris Saint-Germain que le visitará el próximo martes en la ida de los octavos de final, pero la obligación, innegociable, de sumar su séptima victoria consecutiva en la Liga para mantener sus esperanzas de, al menos, aspirar a pelear un título que no se recuerda a estas alturas de temporada tan cuesta arriba.
Es por ello, quizá, que Ronald Koeman apostó por no reservar a nadie dejándole fuera de la convocatoria que ofreció este mismo sábado pero, sumando a más jugadores del filial (Ilaix y Collado) y recuperando a los lesionados Miralem Pjanic y Sergiño Dest, podría en cierta manera repetir la experiencia de la pasada jornada, cuando ante el Real Betis estimó dar descanso de entrada a futbolistas clave como Lionel Messi, Pedri o Frenkie de Jong.
El Alavés, que recuperó el ánimo venciendo al Real Valladolid en su último partido para romper una racha de dos empates y cuatro derrotas en las anteriores seis fechas, acude al Camp Nou, con el ex azulgrana Abelardo en el banquillo, consciente de la enorme dificultad que supone arrancar puntos de un estadio en el que venció por última vez no hace tanto (en 2016) pero donde solo había sumado otra victoria (2000) y en el que ha salido derrotado en 16 de sus últimas 18 visitas. De hecho, de un total de 21 encuentros en feudo azulgrana los vascos acumulan 18 derrotas...
Contemplando sus bajas y atendiendo a la preocupación que le causan en la defensa, Koeman podría introducir cambios en la alineación para dar descanso a alguno de sus hombres con vistas al encuentro frente al PSG pero siempre, lo proclamó personalmente, "poniendo al mejor equipo posible para ganar", consciente de la necesidad de seguir sumando de tres en tres en esta desesperada lucha por recuperar una cierta esperanza de discutirle el título liguero a un Atlético de Madrid cuya primera vuelta liguera fue poco menos que perfecta.