PARÍS -- Los entrenadores de Niza y Olympique de Marsella y el ministro de igualdad de Francia elogiaron al árbitro que interrumpió el partido de la Ligue 1 el miércoles debido a pancartas homofóbicas en el público local.
La ministra de igualdad de Francia, Marlene Schiappa, dijo que las pancartas habían manchado las gradas, mientras que el entrenador de Niza, Patrick Vieira, dijo que el árbitro Clement Turpin se había quedado sin "opción".
El juego se detuvo en la primera mitad durante unos 10 minutos y los jugadores abandonaron el campo ante las pancartas mostradas por los fanáticos del Niza.
Los medios franceses también informaron cánticos homofóbicos durante el partido que Marsella ganó 2-1.
Una pancarta se refería a la compra del Niza por el multimillonario británico Jim Ratcliffe, quien también es dueño del equipo ciclista Team Ineos.
La pancarta usaba la palabra "pedaleo", que significa "pedalear", pero también es un término despectivo que se usa para definir a las personas homosexuales.
Otra pancarta decía: "Más fanáticos en las gradas significa un estadio más gay".
"El árbitro acertó al detener el partido", dijo Vieira, el ex centrocampista del Arsenal y Francia.
"Estas cosas son inaceptables. El mensaje era claro y el árbitro no tenía otra opción. Quizás podría habernos dado un poco más de tiempo para ir a ver a los seguidores y pedirles que quiten la pancarta. Pero me explicó las cosas y las entendí completamente.
"Espero que esto no vuelva a suceder, en Niza o en cualquier estadio".
El rival de Vieira, Andre Villas-Boas, estuvo de acuerdo en que el árbitro tomó la "decisión correcta".
Schiappa dijo en un Tweet que los fanáticos del Niza habían ignorado "varias solicitudes" para retirar las pancartas.
"El fútbol es pasión, no odio", dijo.
La liga francesa ha prometido tomar medidas enérgicas contra el canto homofóbico esta temporada, que ya ha visto interrumpido un partido de segundo nivel entre Nancy y Le Mans.
El canto homofóbico está profundamente arraigado en algunos países de América Latina, especialmente cuando el portero visitante corre para lanzar un saque de meta, y la FIFA se ocupó de varias docenas de casos durante la competencia clasificatoria para la Copa Mundial 2018.
México fue sancionado 12 veces, dos advertencias y 10 multas, mientras que a Chile se le ordenó en tres ocasiones jugar fuera de su Estadio Nacional, aunque simplemente trasladaron los juegos a arenas alternativas en Santiago.
Sin embargo, no hubo casos de partidos interrumpidos.