Perdió el campeón: Liverpool se durmió en su visita a Brighton y dejó puntos sobre el final

Los Reds, con el título asegurado y variantes, salieron con mucha intensidad a jugar un duelo por el honor. Y cuando apenas iban 10' ya se habían puesto en ventaja. Harvey Elliott abrió el marcador empujándola abajo del arco tras un gran desborde, con caño incluido, de Conor Bradley.

El equipo de Arne Slot atacaba y atacaba, sobre todo por el flanco izquierdo del Brighton, y la ventaja parecía ampliarse de forma inminente. Sin embargo, a los 32' llegaría el empate de los locales. Yasin Ayari, tras una gran asistencia de Gruda, le ganó la espalda a la última línea y remató cruzado y mordido para vencer a Alisson Becker.

Sobre el cierre de la primera mitad, una genialidad de Szoboszlai le devolvió la ventaja a los Reds. El volante apareció por derecha tras un tiro libre jugado en corto y la ubicó en el segundo palo de forma sorpresiva para el 2-1. Si fue centro o remate poco importó.

En la segunda mitad todo cambiaría. A los 70', Brighton llegó al empate. Mitoma aprovechó un rebote de Alisson luego de un remate de Danny Welbeck y fulminó de zurda y de sobrepique al brasileñó para el 2-2.

Ya sobre el final, los locales lograron inclinar un partido que había entrado en una meseta. En un ataque, Matt O'Riley apareció libre por izquierda y buscó un centro raso que conectó Hinshelwood para el 3-2. Inmediatamente el línea levantó la bandera por la posición de O'Riley, aunque luego el VAR corroboró que no había fuera de juego.

Finalmente, Brighton terminó quedándose con tres puntos que lo hicieron escalar hasta la 8ª posición a una fecha del final. ¿Por qué es importante? Porque sueña con alguna competición internacional. No le alcanza por puntos y no depende de sí mismo. Si Chelsea es campeón (enfrentará en la final a Betis) y finaliza en 7º lugar (hoy está 4º, en puestos de Champions), liberará un cupo para las Gaviotas.