Hubo un tiempo cercano en el que Manchester City y Liverpool representaban el duelo más electrizante del fútbol británico. Hoy son protagonistas, claro, pero están ambos un paso atrás del líder Arsenal, que domina la Premier League en soledad.
Los dos equipos supieron ser sinónimos de perfección, de intensidad y dominio total. Cada cruce era una final anticipada. Pero en esta temporada 2025/2026, el escenario cambió: ambos llegan golpeados, irregulares y lejos de la versión que marcó una era en el torneo británico.
Manchester City vs. Liverpool, un clásico moderno que perdió brillo
El Etihad Stadium será testigo del enfrentamiento por la jornada 11 entre el segundo y el tercero de la tabla, aunque los números distan de reflejar un gran presente, más allá de sus buenas victorias en la Champions League durante la semana, ante Real Madrid y Dortmund.
Manchester City, con 19 puntos producto de seis victorias, un empate y tres derrotas, atraviesa una campaña inconsistente para los estándares del equipo de Pep Guardiola.
Manchester City está a seis unidades del líder Arsenal, que domina con 25. Liverpool, apenas un punto por detrás (18), también acumula cuatro caídas en diez partidos.
Ambos viven una temporada con altibajos, marcada por lesiones, desgaste y una notable falta de continuidad.
Manchester City se sostiene con Erling Haaland
Mancheter City venía de ganar en casa ante Bournemouth por 3-1. El resultado fue vital para sostener el segundo puesto y, sobre todo, para reencontrarse con algo de confianza. Erling Haaland volvió a ser la respuesta a casi todas las preguntas: marcó dos goles -ya suma 13 en el torneo- y sostuvo al equipo con su habitual voracidad.
El primero de sus goles, a los 18 minutos, fue una muestra de su poder: corrida a pura potencia y definición precisa. El segundo, a los 32', llegó tras eludir al arquero y empujar al arco vacío. Ya en el complemento, Nico O'Reilly selló la victoria con un derechazo desde la frontal que liquidó el partido.
El equipo de Manchester volvió a ganar, pero la sensación sigue siendo la misma: el conjunto de Guardiola brilla a cuentagotas, con tramos dominantes y otros en los que sufre más de la cuenta. Su defensa, que solía ser infranqueable, hoy luce vulnerable. Y su fútbol, aunque todavía eficaz, ya no impone el respeto automático de otros años.
Liverpool busca reencontrarse con su mejor versión en la Premier
En Anfield, Liverpool dio señales de vida al vencer 2-0 a Aston Villa, poniendo fin a una racha de cuatro derrotas consecutivas. El equipo de Arne Slot mostró su mejor cara en semanas, con intensidad y juego directo.
Mohamed Salah aprovechó un error grosero de Dibu Martínez para abrir el marcador antes del descanso, y Ryan Gravenberch amplió la ventaja con un remate desviado que selló el resultado.
El triunfo fue más emocional que táctico: Liverpool necesitaba reencontrarse con su identidad. Venía de seis derrotas en los últimos siete partidos entre Premier y copas, una marca impensada para un club acostumbrado a competir al más alto nivel.
Slot, sucesor de Klopp, todavía busca equilibrio entre presión y posesión, pero el grupo empieza a mostrar señales de recuperación.
El duelo entre Manchester City y Liverpool dirá más de lo que parece
El partido en el Etihad no solo pondrá en juego tres puntos. Será un test de carácter, una medida de cuánto queda del viejo poder de Manchester City y Liverpool.
Ambos necesitan ganar para no dejar que Arsenal se escape en la cima, pero sobre todo para recuperar algo más valioso: la sensación de poderío, de marca de fútbol, que alguna vez compartieron.