Hace diez años, la transferencia de Zlatan Ibrahimovic del Inter de Milán a Barcelona por aproximadamente 46 millones de euros sacudió el fútbol mundial.
La llegada del futbolista sueco al Camp Nou tuvo consecuencias tanto en el equipo catalán, que era dirigido por Pep Guardiola y que acababa de ganar la Champions League, como en el equipo italiano, que recibió a cambio a Samuel Eto'o.
El ex asistente de "Special One" en el equipo de nerazzurri, José Moráis dice que todo se realizó en un viaje a Estados Unidos y no dejó muy satisfecho al técnico portugués.
"Es curioso que Ibra quisiera ir a Barcelona y que fuéramos a hacer una pretemporada en Los Ángeles, en Beverly Hills. Estuvo en ese punto muerto, ya sea que fuera o no. Él quería ganar la Champions. Mourinho estaba un poco molesto porque quería que se quedara. Pero no quería que se siguiera a fuerza y por eso lo dejó ir. Se quedó con nosotros unos días, pero se marchó", señaló el actual entrenador de Jeonbuk Motors de Corea del Sur a ESPN.com.br.
El objetivo del sueco era claro: ir al mejor equipo del mundo para ganar la 'Orejona'. Irónicamente, el delantero fue eliminado con el club catalán por el Inter de Milán.
"Ibra fue a Barcelona para ganar la Champions League y terminamos eliminándolos en las semifinales y ganamos el título. Ibra dijo: "Salí para ganar la Champions y ahora estoy aquí, debería haberme quedado allí para ganar la competencia. Le dije: 'Ibra, jugaste para el equipo equivocado, deberías haberte quedado con nosotros'", dijo Moráis entre risas.
Para empeorar las cosas, Ibra tuvo problemas con Guardiola y estuvo menos de un año en Barcelona. El sueco se marchó a Milán en la temporada 2010/2011, en la que el Barça volvió a ganar la Champions.
¡Lucio, tú no eres Garrincha!
José Moráis recuerda con gran afecto su tiempo a lado de José Mourinho en el Inter de Milán, que se coronó con el triplete en la temporada 2009/2010, cuando el equipo ganó la Copa de Italia y la Serie A.
Algunos de los recuerdos más divertidos de Moráis fueron la convivencia con jugadores brasileños. El defensor Lucio llegó en esa temporada procedente del Bayern Munich, ya que no entraba en los planes del entrenador holandés, Louis van Gaal.
"En los partidos tomaba el balón y quería salir jugando. Y Mourinho le gritaba: Lucio, crees que eres Garrincha, despega el balón ¡y quédate atrás, tú no eres Garrincha!", dijo.
"Lucio se asustó y nunca abandonó la zona defensiva, jugó demasiado y fue uno de nuestros jugadores destacados, un pilar y un gran jugador", dijo.
Otro jugador que tuvo momentos divertidos con José fue el lateral derecho Maicon.
"Era un jugador fantástico. Tuve una experiencia curiosa porque físicamente somos parecidos. En la primera práctica de la temporada, estaba en uniforme, salí al campo y los aficionados comenzaron a gritar 'Maicoooon, Maicoon'. Cuando Maicon llegó a la práctica, Mourinho dijo: "Maicon, José Moráis ya ha ocupado tu lugar'", indicó entre risas.
"A Mourinho le gusta jugar y en los entrenamientos era un ambiente relajado y saludable, lo que hace la diferencia, es un tipo que conoce ese tipo de convivencia", dijo.