Ahora se presenta un “año nuevo” para el Chucky, que incluye el reto de la UEFA Europa League
La pandemia marcó un antes y un después para el mundo entero. Todos, de alguna forma u otra, hemos tenido que modificar nuestras vidas debido a la pausa inesperada. Muchos han salido con detalles negativos, pero acompañados con cosas positivas.
Entre esas personas está Hirving Lozano. Antes de la pausa, el mexicano parecía estar en medio de una batalla en Italia donde sufría una resaca seria debido a la salida de Carlo Ancelotti.
Ancelotti pidió la llegada del ex-PSV para probar su suerte en la Serie A y Gennaro Gattuso, no. Gattuso llegó a intentar cambiar el camino lleno de piedras por el que pasaba el equipo napolitano.
El nuevo técnico tiene una reputación de jugador que incorpora ahora en cada entrenamiento y partido que dirige: sin rodeos, directo, fuerte y sudar la camiseta. En una sesión de trabajo, Gattuso no vio esto en Chucky, hubo conflicto y lo echó del entrenamiento. Esto fue la segunda semana de junio y a pocos días de la final de la Coppa Italia contra la Juve, donde lo último que podía esperar el mexicano era ver minutos en el choque.
Y empezaron los rumores, tomaron fuerza la posibilidad de ver a Lozano en un club lejos del Napoli donde chocaba contra una pared llamada Gattuso. Sin embargo, en lugar de darse por vencido, hacerle cara fea a su entrenador, el mexicano empezó a aprovechar las oportunidades que se le presentaban dentro de su actual equipo.
Llegó el duelo ante el Verona, un poco más de una semana después de que lo corrieron del entrenamiento. Y así, al 83, entra el ‘Chucky’ con 7 minutos de ventana, y anotó para sellar la victoria napolitana de 2-0.
El antes del mexicano estaba quedando poco a poco en el pasado. Ese gol, fue oxígeno puro y motivación para ganarse un puesto como se debe: sin palabras, con trabajo dentro del campo.
El después parece prometedor para Lozano. En las 2 jornadas disputadas por el Napoli, ha estado entre los 11 elegidos para Gattuso que incluye un par de goles ante el Genoa.
Ahora se presenta un “año nuevo” para el Chucky, que incluye el reto de la UEFA Europa League, torneo que realizó este jueves su sorteo. El Napoli se encuentra en el Grupo F donde se enfrentará a la Real Sociedad de La Liga, el AZ Alkmaar de Holanda y el Hnk Rijeka de Croacia. Un grupo que debería ser bastante accesible para el equipo napolitano, que se quedó con las ganas de clasificar a la UEFA Champions League donde se vio eliminado el 8 de agosto ante el Fútbol Club Barcelona.
Ganarse confianza en la Serie A con Gennaro Gattuso, podría significar minutos importantes en la Europa League. Minutos importantes en el torneo europeo, podría garantizarle, no solo estar siempre en la mira de Gerardo Martino en la selección, si no volver a ser ese Chucky del que estábamos tan acostumbrados y vimos realizado con ese tan famoso gol contra Alemania el 17 de junio del 2018.
Lozano tiene la capacidad de mantener fija la balanza entre el Napoli y todavía darlo todo en la selección del ‘Tata’. En los próximos días viajará directo a Amsterdam para integrarse con el Tri donde se enfrentarán al equipo de los Países Bajos el 7 de octubre y contra Argelia el 13 del mismo mes.
La vida nos pone retos para saber de qué estamos hechos realmente. Así le tocó a Lozano. Un jugador que rara vez había visto crítica por su juego en su carrera que ha sido brillante hasta ahora. El desacuerdo con Gattuso, la falta de minutos, el cambio de técnico inesperado a uno que no te quería originalmente en su plan de trabajo, pudo haber sido el pretexto perfecto para que el Chucky calentara la banca. En lugar de eso, se sacudió del mal momento, creció, demostró dentro del campo y hoy, nos encontramos con un jugador mexicano de excelente calidad dentro y fuera de la cancha.