Alfonso Sosa, técnico del San Luis, aseguró qué hay “borrón y cuenta nueva” en el tema de las indisciplinas con su refuerzo, el argentino Ricardo Centurión.
El estratega, quien vuelve a la Liga MX para “quedarse”, confía en encontrar la mejor versión del atacante. Y aunque sabe que no será sencillo, ya habló con el sudamericano para dejar todo en claro.
“No es fácil (de gestionar) por los antecedentes que ha tenido, pero hasta ahorita es lo que hemos escuchado nada más. Esas son las referencias, pero ya después nos tocará a nosotros involucrarlo en el sentido de que se sienta importante, querido y que se sienta jugador de futbol después de mucho tiempo sin haber estado entrenando justamente por el tema de indisciplinas hasta ahora está regresando y es una labor de todos”, señaló, asegurando que vio disposición del jugador.
“Yo lo que le dije fue que a partir de que él llegó, el empieza de cero, ahí quedan los antecedentes, necesitamos que muestre compromiso que nos ofrezca su talento y tenga voluntad para hacerlo”, agregó.
Centurión tiene un largo historial conflictivo; en 2016 impactó su carro importado ante otros tres vehículos y el jugador huyó del lugar de los hechos. A principios del 2017, tras el Superclásico entre Boca y River, fue captado por las cámaras de seguridad del hotel de concentración del conjunto xeneize actuando de manera violenta y tuvo que ser detenido por sus compañeros.
Tiempo después, Melisa Tozzi, pareja de Ricardo, presentó una denuncia en contra del futbolista por violencia de género, asegurando que la ahorcó y amenazó en diversas ocasiones.
Otro detalle es su pasión por las armas de fuego; la prensa argentina ha publicado diversas fotos del jugador portándolas.
En febrero de 2019, Ricardo fue separado del primer equipo del Racing por empujar a su técnico, Eduardo Coudet. El volante se molestó con su estraga por hacerlo ingresar al terreno de juego cuando la plantilla perdía por 2-0 ante River.