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CIUDAD DE MÉXICO - Mientras Guillermo 'Memo' Ochoa se comprometía con las multitudes de aficionados del Club América que lo esperaban en el aeropuerto internacional Benito Juárez, parecía como si llegara un jefe de estado que había estado en el exilio en vez de tratarse del clamor popular que provoca un nuevo fichaje de verano para un club de la Liga MX. Los aficionados habían comenzado los preparativos, sin muchos obstáculos ni ayuda de la seguridad, un par de horas antes, tallando meticulosamente un camino azulcrema para que el portero de la selección mexicana saliera del aeropuerto y llegara al transporte que lo esperaba. Los tambores y los cánticos hacían eco en la sala de llegadas de la Terminal 2 cuando se filtró la noticia de que su avión retrasado desde Madrid había aterrizado. Los turistas extranjeros habrán pensando que que habían aterrizado en Marte, al no tener idea del gran acontecimiento del fútbol mexicano. El jugador de 34 años sabía que su regreso a "casa" sería bien recibido por los americanistas, pero el arquero no esperaba una bienvenida tan grande. La sonrisa radiante en su rostro, cuando uno de la multitud de más de 500 personas le puso un sombrero amarillo sobre su famoso cabello rizado, mostró cuánto estaba disfrutando del recibimiento. Incluso cuando algunos aficionados brincaron sobre el automóvil que lo llevaba, gritaron su nombre, y Memo abrió la puerta y agitó la bandera del Club América con vítores. Las escenas se volvieron virales en México y en el mundo. El propio Ochoa se expresó a la prensa oficial del Club América en el auto que lo transportaba del aeropuerto: "El cariño y el amor de la gente es incomparable. Desde la distancia se escuchan cosas, pero vivirlo es diferente". Las principales ligas europeas son indudablemente la élite del fútbol mundial, pero en ningún otro rincón del planeta Ochoa habría recibido la semejante recepción como la de su llegada a México. El gran arrepentimiento de su tiempo en Europa es que Ochoa nunca pudo jugar en la Champions League. Militando en clubes como Ajaccio, Málaga, Granada y el Standard Lieja belga es un logro, pero no estuvo a la altura de las expectativas creadas por sus sobresalientes actuaciones en los Mundiales de 2014 y 2018, incluso si el oriundo de Guadalajara fue el primer portero mexicano en establecerse en el viejo continente. Sin embargo, Ochoa, quien debutó en 2004 para Las Águilas antes de partir en 2011, sabe muy bien que América es más que la gran mayoría de los clubes europeos en términos de envergadura. Es una institución que cuenta con más seguidores en Facebook y Twitter que el gigante de la NFL, los Vaqueros de Dallas. "Para mí, venir al América en los tiempos que son ahora, en los momentos, a esta edad, creo que es un gran paso en mi carrera, es una gran elección y considero totalmente exitosa mi carrera", dijo el guardameta a TUDN. De manera crucial, quizás, es que en ningún otro lugar competitivo hubiera podido comandar un contrato de $4 millones que, según los reportes, ganará. Habría sido improbable que un club de la MLS lo igualara, mientras que esos salarios deberían ayudar a aliviar cualquier preocupación de seguridad que el portero haya tenido en regresar a la Ciudad de México. Al principio del verano, Ochoa originalmente no planeaba regresar a México en esta etapa de su carrera, pero se combinó un conjunto de circunstancias para que fuera la opción más lógica tanto para el jugador como para el club. La situación de Ochoa en Standard Lieja se había vuelto un poco incómoda. Claramente quería salir, pero una renovación automática de un año de su contrato lo estaba dificultando. Agregando a eso la falta de interés de un club realmente grande, aunque hubo muchas consultas de buenos equipos en Europa, y la elección de regresar a México se hizo más fácil. "Si Memo hubiera tenido una oferta importante en Europa, de equipos de mayor jerarquía, sin ninguna duda yo creo que se quedaría por allá, no hubiéramos podido ni siquiera entrar a establecer una negociación o una plática para poder traerlo", dijo Miguel Herrera a ESPN. La venta del seleccionado argentino Agustín Marchesín a Porto por una tarifa reportada de más de $8 millones de dólares significaba que el puesto en la portería del América estaba vacante, mientras que las ventas de Edson Álvarez al Ajax ($17 millones) y Mateus Uribe a Oporto ($10,5 millones) aseguraron que al club no le faltaba dinero. Con la partida de tres jugadores seleccionados, Las Águilas tuvieron que reaccionar para apaciguar a los fanáticos. Traer de vuelta a Ochoa fue la elección popular. Al fichar a Ochoa, el club no solo consigue el mejor portero de México, sino también al jugador más comercializable de la Liga MX. Herrera incluso se ha molestado por la pregunta de cuándo Ochoa hará su debut, que parece poco probable que esté en la semifinal de la Leagues Cup el martes en Houston contra Tigres (8:30 p.m. ET, ESPN2 en EE.UU.). Tampoco es el único fichaje que ha acaparado la atención de los medios mexicanos en el Club América este verano. También está el asunto del ex jugador del Barcelona, Giovani dos Santos, quien con Ochoa es uno de los jugadores más reconocidos de América del Norte. LA Galaxy ejerció su opción de comprar el contrato de Gio el 1 de marzo y dejó su carrera en el limbo. Los rumores vincularon a Dos Santos con equipos de Brasil, China y Katar, por lo que fue una sorpresa que un jugador que ha tenido una relación difícil con la prensa mexicana haya optado por regresar. Pero luego, Dos Santos es de CDMX, su padre brasileño Zizinho jugó para Las Águilas y la familia, incluido el hermano Jonathan dos Santos, han sido aficionados del club durante mucho tiempo. El hecho de que Herrera, el ex entrenador de México que puso a Dos Santos como titular en el Mundial 2014, sea el entrenador del Club América fue un atractivo más. Y el América tenía dinero para gastar después de las ventas de los mencionados tres seleccionados. Y aunque el salario reportado de Gio es entre $2.5 millones de dólares y $3 millones por año, es mucho menos de lo que estaba ganando en LA Galaxy. Ha sido un comienzo tentativamente positivo hasta ahora para Dos Santos, cuya presencia se ha visto ligeramente eclipsada por la firma de Ochoa.  "Yo no sé quién tiene duda de eso (de que Gio tiene mucho que aportar), lo conozco bien, sé lo que puede dar, hoy lo volvió a demostrar", dijo Herrera después del partido contra Tijuana. "Nadie en este club duda de la capacidad de Gio, por eso lo pongo a jugar. Como lo dije desde que llegó: él necesitaba estar físicamente a tono. Cuando está (físicamente) a tono, es un jugador diferente". Sin embargo, en su primer partido como titular en casi un año, Dos Santos no figuró en el partido en Toluca antes de ser sustituido más o menos al minuto 60. Herrera está siendo particularmente cuidadoso con el estado físico del jugador, dando indicaciones de que la razón por la que Dos Santos no ha alcanzado la expectativa es por problemas de estado físico. Dos Santos no estuvo en el equipo contra Atlanta United en la derrota en la Copa de Campeones y también se perdió el partido contra Morelia, aunque debería estar listo para el partido del martes contra Tigres en la Leagues Cup. Quizás debido a los costos asociados con traer grandes figuras, América se propuso a fichar jugadores sudamericanos de más bajo perfil o jóvenes mexicanos que tenían el potencial de desarrollarse en la Liga MX para luego exportarlos, produciendo ganancias significativas para el club. Tal es el caso reciente de Raúl Jiménez, Diego Reyes, Diego Lainez y Edson Álvarez. Aún falta determinar si los fichajes de Ochoa y Dos Santos producirán los resultados que se esperan tras la venta de seleccionados establecidos como Marchesín, Uribe y Álvarez. No hay duda que traer a dos jugadores de renombre garantiza que el concepto de americanismo sigue latente. El América necesitaba fichajes como Ochoa y Dos Santos, no tanto para establecerse una vez más en la liga, sino para enviar un mensaje a los clubes 'nuevos ricos' como Tigres y Monterrey que todavía Las Águilas pretenden volar alto, con todas las intenciones de realizar golpes en el mercado de transferencias cuando quiera y pueda.
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