GUADALAJARA -- La noche en el estadio Akron fue totalmente distinta a todas. El destino quiso que el mismo día en que Jorge Vergara falleció, Chivas y América femenil se enfrentaran en el estadio que Vergara construyó, dirimiendo un duelo de Liguilla.
El ambiente fue de absoluta solemnidad. Durante toda la noche no se escuchó una sola canción en las potentes bocinas de última generación. Como si se hubiera establecido un protocolo ante esta situación, el silencio y el respeto envolvieron a una noche triste para Chivas.
Al llegar al inmueble, un listón negro gigante posó en el acceso principal. El ambiente de luto está en el aire. La única música que se escuchó fue la del protocolo de la Liga BBVA MX. Ese sí, es inevitable que se escuche.
Después, un minuto de aplausos, las 22 jugadoras de rodillas en el círculo central y un video de la vida y obra del polémico empresario.
El minuto de aplausos se prolongó, pero la juez central recordó que "el show debe de continuar". Comenzaron las acciones. El resultado en el campo también fue epílogo de la tristeza que embarga a la nación chiva. Una derrota que ni al mismo Jorge Vergara le hubiera gustado ver al tratarse de un tropiezo en su casa, nada menos que ante las Águilas del América.