MONTERREY -- Los abonados del club Monterrey le quedaron mal a las Rayadas, en virtud de que el estadio BBVA no se llenó para el partido de vuelta de la final de la Liga MX Femenil, en el que el equipo enfrentó a Tigres Femenil.
Para el partido de vuelta asistieron 38,251 aficionados, lo cual impidió imponer récord de asistentes en las finales del futbol femenil en México.
El club puso a la venta boletos para el cotejo y, en el mismo día, anunció que estaban agotados, por lo cual agradeció a los seguidores que adquirieron una entrada para este compromiso.
Sin embargo, la totalidad de los lugares no fue puesta a la venta dado que los abonados, que son más de 30,000, tenían la opción de activarlos para tener un lugar asegurado en el inmueble.
Paulatinamente, los seguidores llegaron al estadio para colocarse en sus sitios correspondientes, pero cuando faltaba media hora para el arranque del cotejo, se registraban muchas zonas vacías.
Al arranque del encuentro, una parte considerable de las gradas estaba sin ocuparse y desde luego llamó la atención que en la zona donde regularmente se ubica la barra de La Adicción lucía semi vacía.
El club dio a conocer la cifra de asistentes al estadio, que tiene capacidad para 53,500 espectadores, que fue de 38,251, lo cual quedó lejos del récord en un partido de futbol femenil en México que es de 51,211, registrado en el partido de vuelta de la final del Clausura 2018, disputado en este mismo escenario.
La asistencia en el cotejo de ida de la final del Apertura 2019, jugado en el estadio Universitario, fue de 41,615 seguidores, pero hoy la cifra fue menor.