El Puebla Larcamón es un “dolor de muelas” que le puede hacer la vida imposible a quien se le ponga enfrente
A lo largo de la historia el futbol tiene en su haber capítulos maravillosos escritos con letras de oro gracias a la magnitud de la gesta, caracterizada, con tintes épicos y heroicos, por hacer posible lo imposible.
Lo que el profesor Nicolás Larcamón está realizando con el Puebla en el Guardianes 2021 de la Liga MX es, por donde se le mire, sumamente plausible y meritorio.
Luego de que Juan Reynoso clasificara a “La Franja” a la Liguilla vía repesca el semestre pasado tras 8 torneos de ayuno en la Angelópolis, parecía complicado que este equipo repitiera con su presencia en la “Fiesta Grande” de nuestro futbol.
Con apenas 36 años de edad, el novel estratega argentino se mantiene en la línea de con poco hacer mucho. En el Deportivo Anzoátegui de Venezuela y Antofagasta, Huachipato y Curicó de Chile, realizó buenos trabajos que le valieron aterrizar en suelo azteca.
Para sorpresa de muchos, incluida la mía, Larcamón, a falta de tres jornadas por disputar, ya superó en puntos (23 por 20 de Reynoso) y accionar lo hecho por su predecesor peruano hace seis meses.
El cuarto lugar en el que está situado el Puebla no es obra de la casualidad. Sin contar con la plantilla más generosa del certamen, Nicolás ha construido, desde el funcionamiento en bloque y convencimiento, una escuadra reconocible y comprometida con la causa.
En el futbol actual no es muy común utilizar línea de tres centrales. Inter de Milán, Atlético de Madrid y Barcelona son clubes que juegan con ese sistema defensivo, el cual requiere un entendimiento absoluto entre los involucrados.
El DT blanquiazul ha depositado toda su confianza en Juan Segovia, Maxi Perg y el jovencito mexicano Israel Reyes para poner en práctica su línea de tres, la cual ha entregado buenos dividendos al ser la sexta mejor defensa del torneo con 13 goles recibidos en 14 partidos disputados hasta el momento.
Hace 20 años, Mario Carrillo me comentó en una charla que a los miembros de su línea de tres les decía que jugaran creyendo que sus otros dos compañeros se iban a equivocar y tendrían que salir al quite para mitigar el fuego. De esta forma evitas caer en excesos de confianza y te mantienes alerta por sí y por no los 90 minutos.
Lo que sí es una pena, es que este Puebla no pueda ser apreciado y disfrutado en vivo y como se debe por su gran afición en el Estadio Cuauhtémoc. De momento, la pandemia mantiene vacío el templo de las y los poblanos, “Cuando hay para carne, es vigilia”.
Otro de los “caudillos” en el campo para Larcamón es el delantero Santiago Ormeño, que con goles, sacrificio y entrega total, reclama con razón un llamado a la Selección Mexicana o peruana por su doble nacionalidad.
El futbol está lleno de historias increíbles. Dinamarca en 1992, la Grecia del 2004, Costa Rica en 2014, el Leicester City del 2016, Atalanta peleando el Scudetto en Italia y jugando Champions League. Guardando las proporciones, pero con el mensaje claro de que los modestos también dan guerra, el Puebla de Nicolás Larcamón es un “dolor de muelas” que le puede hacer la vida imposible a quien se le ponga enfrente y por ende, puede y debe soñar con llegar lejos en el Guardianes 2021.