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Alexis Vega y el tratamiento que le ayudó a no dejar el futbol al igual que a Messi

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'Chelís' pide al Tri Olímpico jugar sin complejos ante Brasil para disputar el oro en Tokio (1:35)

El especialista de ESPN desmenuza la victoria azteca sobre Corea del Sur y su boleto a semifianales del torneo olímpico varonil en futbol. (1:35)

El padre del atacante del Tri Olímpico recuerda los problemas de su hijo por ser chaparrito y cómo logró seguir en el futbol

Ernesto Vega contestó el teléfono y escuchó a su hijo llorando al otro lado de la línea. “Ven por mí papá, me dijeron que estaba fuera de Pumas”, le dijo Alexis, de entonces 15 años. “¿Qué pasó?”, preguntó. “Dijeron que estoy muy chaparrito para el futbol”, replicó el ahora jugador de Chivas y una de las figuras de México en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Entonces, siguió un camino parecido al que alguna vez marchó Lionel Messi.

“Alexis entró a un tratamiento para el crecimiento. Cuando lo corrieron de Pumas, lo corrieron por chaparrito. Días después, el visor que me hizo el favor de llevarlo a Pumas (el entrenador Hedilberto Isidro Coxtinica Reyes), me preguntó por qué Alexis andaba en la calle en horas que tenía que estar en Cantera. Le contamos que le dieron las gracias por la estatura”, contó a ESPN, Ernesto Vega, papá de Alexis y mejor conocido en su barrio como el 'Muñeco'. “El día que lo corrieron a mi hijo le dio temperatura en la noche, de tanto que lloró”

Alexis Vega inició en una filial de Cruz Azul, pero Pumas le abrió la puerta en fuerzas básicas. Durante seis años, Vega recorrió diario las 21 estaciones de la línea tres del metro de la CDMX, para hacer el trayecto desde su barrio, Santa Isabel Tola, a Cantera, en donde entrenaba, hasta el día que le dijeron que podía driblar todo, menos la estatura.

“El profesor Hedilberto Isidro Coxtinica fue hablar con el entrenador de Pumas y le confirmó que habían corrido a mi hijo porque era por chaparrito. Me habló días después, me dijo que no me fuera a ofender, pero él le iba a pagar un tratamiento de crecimiento a mi hijo. Me dijo ‘su hijo es un jugador maravilloso’ y él se encargó de encontrar el tratamiento, llevar la comida que le pedían y me dijo que yo sólo me encargaría de llevarlo a las citas, junto con mi esposa. duró seis meses el tratamiento y si creció en un año un buen, porque era bajito como yo”, recuerda Ernesto Vega, que ahora ve cómo su hijo triunfa en Tokio 2020.

El tratamiento para el crecimiento no fue suficiente, Alexis Vega se quedó un año y medio sin jugar, entró a estudiar la carrera de Turismo y se había decepcionado del futbol. Hasta que una selección de su colonia, tuvo un partido amistoso con la Sub 17 del Toluca y su papá lo convenció de ir: “ahí mi hijo anotó tres goles, el lunes ya estaba citado para entregar sus papeles”.

“La verdad sí me imaginé muchas cosas con mi hijo, pero nunca pensé que fueran tan pronto. Todo fue rápido, su debut y todo lo demás. Me imaginé todo lo que ha hecho, aunque ha sido todo de manera veloz. Siempre le digo que uno siempre ha sido sencillo, él sabe lo que pasamos, lo que él sufrió, padeció. Él también es así, muy humilde”, recuerda el papá de uno de los cuatro jugadores “más impresionantes” de la fase de grupos de los Juegos Olímpicos.

En la madrugada del martes, Alexis Vega enfrenta a Brasil en las semifinales de Tokio 2020 y al igual que Lionel Messi, dribló la estatura y su siguiente objetivo es deslumbrar al mundo.