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Enzo Fernández, el campeón del mundo que se hizo líder de Chelsea y va por un logro inédito

NUEVA YORK (Enviado especial) -- El liderazgo no es una cualidad que se construya. O se tiene o no. Es posible sumar experiencia y evolucionar, pero no tener una voz de mando real si no hay ciertas cualidades innatas. A los 24 años, Enzo Fernández tiene todas esas cualidades. Y por eso es uno de los futbolistas más importantes del Chelsea, que jugará la final del Mundial de Clubes contra PSG, este domingo 13 de julio.

El argentino, figura clave del título de la Selección en Qatar, buscará ser el primer jugador en ser campeón mundial de selecciones y de clubes en esta nueva era. Su influencia en el combinado dirigido por Lionel Scaloni creció a lo largo del certamen en Medio Oriente, mientras que lo que significa para el club londinense se terminó de consolidar aquí en Estados Unidos.

A pesar de la responsabilidad de llevar la cinta en una final del mundo, Enzo muestra tranquilidad, una característica fundamental para cualquier líder: "No tomo la capitanía con responsabilidad excesiva, pero claro que es es muy lindo ser capitán de Chelsea. Obviamente si me designaron capitán es porque algo bueno debo estar haciendo. Y le agradezco a los técnicos que me han elegido para llevar la cinta".

Enzo Maresca lo elevó a este lugar apenas se hizo cargo del plantel. El principal capitán es Reece James, pero hoy es suplente y por eso lleva el brazalete el exmediocampista de River Plate. El DT italiano elogió la influencia que ejerce Fernández hacia sus compañeros y también su rol futbolístico en el equipo. Es líder espiritual pero también desde el juego.

En el Mundial, disputó los seis partidos y en cinco fue titular (solo faltó al primero ante LAFC, en el que entró en el segundo tiempo). Dio tres asistencias y en los cuartos de final y en las semis lució la cinta de capitán. La dupla que forma con Moisés Caicedo ya es una de las mejores de la Premier League y en el choque ante PSG tendrá el gran desafío de enfrentar al "mejor equipo del mundo", según el propio Enzo.

De todos modos, también mostró autoestima cuando se le preguntó si era una motivación extra a enfrentar al mejor mediocampo del mundo: "No sé si es el mejor, pero ya jugar con la camiseta de Chelsea nos motiva lo suficiente".

Más allá de las etiquetas, esa será la disputa fundamental de la final del domingo. Vitinha, Fabián Ruiz y João Neves han brillado durante todo el año y son la sala de máquinas de un PSG demoledor. Enzo, Moisés (llegaría en buenas condiciones físicas) y Cole Palmer deberán trajinar como nunca para tartar de cortar los circuitos de juego y aprovechar los pocos espacios que se generen.

Enzo es un futbolista versátil, sabe jugar bien con la pelota cuando su equipo tiene la iniciativa y propone y también es inteligente para presionar y defender. Maresca lo utiliza en diversos roles porque sabe que puede cumplir: puede ubicarlo en la cabeza de la jugada para sacar la pelota o como llegador al área y definidor. Es uno de los principales activos del conjunto londinense.

También sabe jugar estas instancias, lo que habla de su temperamento. Disputó 6 finales, de las cuales ganó 5. "La verdad que las finales son importantes, me gusta jugarlas. He tenido la suerte de ganar la mayoría. Lo voy a disfrutar, no será tanto como la del Mundial, pero voy a intentar disfrutarla de la mejor manera".

Enzo Fernández, a los 24 años, está en la puerta de lograr algo único y su enfoque es absoluto: "Es muy importante este título para el club, juegan los mejores equipos del Mundo. Trataremos de preparar el partido de la mejor manera, sabemos con el equipo que nos enfrentamos, pero confiamos en nuestras armas".