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Cómo vivió Ancelotti su debut en la Selección brasileña

Carlo Ancelotti fue la figura principal en Guayaquil. El italiano decutó como entrenador de la selección brasileña, que empató sin goles con Ecuador en las Eliminatorias de la Copa del Mundo.

El resultado decepciona a los apurados que imaginaban un cambio drástico en el fútbol tras la salida de Dorival Júnior, pero aunque eso no fue suficiente dentro del campo para garantizar los tres puntos, fuera del campo quedó muy claro que el comportamiento del nuevo cuerpo técnico será diferente.

ESPN estuvo presente en el estadio y siguió cada movimiento del nuevo seleccionador de Brasil, quien no necesitó muchos minutos para llamar la atención. Al entrar con traje y corbata, como lo hizo en su etapa en el Real Madrid y otros grandes equipos que dirigió en Europa, Carletto captó la atención de los fotógrafos, quienes lo enfocaron hasta que la pelota empezó a rodar.

A partir de entonces, Ancelotti adoptó una discreción casi total. A pesar de pasar la mayor parte del tiempo de pie, dejó las quejas, los gritos y los gestos grandilocuentes a Francesco Mauri, uno de los asistentes que lo acompañó en su nuevo puesto en la CBF.

El entrenador aparece en momentos puntuales: una corrección de posicionamiento para Vanderson y Gerson, aplausos por cada intento de jugada individual de Estêvão y alguna que otra queja al árbitro.

Ancelotti, el primero en bajar al vestuario tras la primera mitad, mantuvo su postura en la etapa final, en un comportamiento muy diferente a los tiempos de Dorival Júnior. En el Corinthians, el ex técnico estuvo eléctrico, gesticulaba demasiado y gritaba mucho en las bandas.

Carletto no es así, ni siquiera cuando se trata de dar instrucciones a los que se han sumado, como Matheus Cunha y Martinelli. Los dos estuvieron guiados por Francesco Mauri la mayor parte del tiempo y luego escucharon rápidamente a Ancelotti.

Las sustituciones no transformaron a Brasil, que tuvo que conformarse con un empate sin goles. Ancelotti, por supuesto, no estaba contento con el resultado, aunque no lo admitirá públicamente.

Discreto, de pocas palabras y gestos cuidadosos, Carletto comenzó su trayectoria con la selección de Brasil a su manera. Su actitud no cambiará. La expectativa es que los resultados sí.